La Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (FAMPA) de Ceuta no está dispuesta a que las grandes editoriales “hagan negocio” a costa de las familias ceutíes, ya sea directamente de sus bolsillos o través de los 900.000 euros que la Ciudad Autónoma destina este año a incrementar el banco de libros que puso en marcha el verano pasado.
La LOMCE, que comenzará a implantarse desde septiembre en 1º, 3º y 5º de Primaria, así como en 1º de FP Básica, trae consigo una renovación de materiales contra la que la FAMPA quiere hacer “insumisión”.
La Federación que preside Mustafa Mohamed desarrollará hasta principios de curso, en línea con la propuesta de la Confederación Española de Asociaciones de Padres de Alumnos (CEAPA), de la que forma parte, una campaña para que los progenitores ceutíes eviten, “si puede ser con la complicidad de los centros educativos”, incurrir en “gastos innecesarios”.
Con la LOMCE, Ciencias de la Naturaleza y Ciencias Sociales, que hasta ahora se impartían juntas en Conocimiento del Medio, que desaparece, se desdoblan. También es nueva Valores Sociales y Cívicos, la alternativa a Religión.
El contenido de otras materias como Matemáticas o Lengua también ha cambiado porque el nuevo currículo ha incorporado unidades didácticas pero para Mohamed “es evidente que se trata de una cuestión de voluntad política y docente la posibilidad de exprimir, sacar todo el rendimiento y no exigir desembolsos no imprescindibles a las familias o a la Administración sin con ello logramos que se cubran otras necesidades o que las ayudas públicas lleguen a más estudiantes”.
Castilla y León, Murcia y Cantabria, gobernadas por el PP, así como Andalucía (PSOE), son partidarias de mantener todos los libros de la LOE, incluso el de Conocimiento del Medio. Los ejecutivos del País Vasco, Cantabria y Castilla y León han optado por que no se compren los libros de la alternativa de Religión y serán ellos mismos los que elaboren sus materiales didácticos.
Doce Autonomías que no quieren cambiar los manuales se escudan en que ninguna ley obliga al profesor a usar libros en clase, como la consejera de Educación de Ceuta, Mabel Deu, ha apuntado a veces al ser preguntada por este tema.