Asegura que, pese a que sigue en coma, al menos “ahora tiene alguna oportunidad de sobrevivir. En Marruecos no” Desde que el pasado sábado sufrió un accidente en Tánger, el marroquí residente en Cataluña Halid Hashas permanece en coma tras conseguir llegar a Ceuta y ser trasladado, dado su estado de gravedad, al hospital gaditano de Puerta del Mar.
En el momento del accidente se le trasladó a uno de los hospitales de Tánger “donde tan sólo tenía una camilla y una máscara de oxígeno y se nos pidió pagar 50 euros para realizarle unas placas”. Ante la impotencia de la familia, que tuvo que trasladar hasta el centro hospitalario una manta, solicitaron desesperados que le trasladaran hasta Ceuta “a cuya sanidad tenía derecho porque veíamos que se moría y que no se hacía nada para remediarlo”. Su padre, Abselam, recientemente viudo y que se ocupa de sus seis hijos, explica que tuvo que invertir sus ahorros en pagar 300 euros para poder salir del hospital, 250 por el traslado hasta la frontera y 120 a la gendarmería para que hicieran la vista gorda. Asegura que “estamos todos muy mal, pero al menos sabemos que en Ceuta le han atendido en condiciones y al ver que no podían hacer mucho más, le han trasladado hasta la península. Estamos esperando para tener noticias”.
Una ambulancia del 061 fue requerida en la frontera para recoger al herido diagnosticándole un traumatismo craneoencefálico y su familia agradece la atención sanitaria española ya que “si se hubiese quedado en Marruecos posiblemente ya estaría muerto porque no había medios”, apunta el padre lamentando la situación que están viviendo.