La familia Arraoui ha podido enterrar esta mañana a Ibrahim. Y lo ha hecho rodeada de muchísima gente. Familiares y amigos, muchísimos amigos que estudiaban con él. Chicos y chicas con lágrimas en los ojos porque aún no se creen lo ocurrido. También quienes eran sus profesores, apenados por la pérdida de un alumno bueno, noble y aplicado.
Reda, el joven que le acompañó a Ceuta a pasar un día de playa también ha querido ir a despedirle. Ayudado por una maleta, aún dolido por los golpes que presenta pero sobre todo muy afectado psicológicamente.
Ibrahim descansa ya para siempre en el cementerio de Tetuán.