La oposición se empeña en hablar de la supuesta falta de solvencia de la Ciudad Autónoma, pero este discurso lo acompaña de propuestas que no llevan más que a elevar hasta límites insospechados el gasto.
En el pleno del próximo martes día 7, Caballas, PSOE y la diputada no adscrita Fátima Hamed, volverán a presentar la carta a los Reyes Magos de manera irresponsable ya que lo único que pretenden es hacer ver a los ciudadanos que presentan muchas propuestas pero dándole exactamente igual el coste que tengan o si pueden realizarse o no. Qué fácil es pedir tan a la ligera.
Los discursos de la oposición vendrán acompañados de adjetivos dirigidos al Gobierno como “insensible”, porque insensible es un Gobierno que ha creado un salario social, insensible es un Gobierno que dedica 1,47 millones de euros a pagar el alojamiento en pensiones y ayudas al alquiler para que nadie se quede sin techo, insensible es un Gobierno que destina 1,8 millones de euros a bonificaciones fiscales en el pago del recibo de agua y basura, insensible es un Gobierno que dedica 600.000 euros a la alimentación de personas necesitadas, insensible es un Gobierno que financia con 145.000 euros el economato de Cruz Blanca en Príncipe Alfonso, insensible es un Gobierno que destina 900.000 euros al programa de reposición de libros, insensible es un Gobierno que destina 570.000 euros a becas universitarias y de segunda oportunidad, insensible es un Gobierno que abre los comedores escolares en verano, insensible es un Gobierno que dedica 130.000 euros a pagar plazas en guarderías privadas para completar la oferta de los tres centros públicos, insensible es un Gobierno que da formación y da trabajo a desempleados en la Escuela de la Construcción, en escuelas taller, en programas de formación ocupacional becados y en planes de empleo…
Insensible, en todo caso, es un gobierno como el socialista cuando gobernó. Qué pena, que no se dieran cuenta entonces cuando la actitud de los ministerios de Educación de los gobiernos de Zapatero, que nunca atendieron la cuestión referida a los comedores escolares que tanto critican ahora o que no construyeron los centros educativos que ahora reclaman, como tampoco cumplieron su promesa del enlace puerto-frontera que ahora solicitan, como tampoco cambiaron el modelo productivo de Ceuta que reivindican ahora con el uso de los Presupuestos Generales del Estado de 2015... el mismo PSOE que abandonó el poder enterrando el convenio Ciudad-Ministerio de Educación, el que quitó la subvención a la producción de agua y al transporte de los residuos a la península y que ahora habla de sensibilidad y prioridades.
Pero nada importa, todo vale en esta demagógica carrera hacia las elecciones de 2015.
Porque el Gobierno de la Ciudad no solo tiene que aprobar todas y cada una de las propuestas de la oposición sino que además debe hacerlo sin eliminar servicios ni inversión, sin elevar la deuda y sin subir impuestos ni tasas, más bien todo lo contrario, debe incrementar los servicios y la inversión, reducir el endeudamiento y los impuestos.
¿El Ejecutivo debe aprobar esas propuestas de la oposición sin límite? ¿Sin la responsabilidad de hacerlas teniendo en cuenta el capítulo económico y su viabilidad? Y si el Gobierno aprueba alguna propuesta, ya se sabe, será única y exclusivamente mérito de quien se dedica a escribir la carta a los Reyes Magos. Todo vale, solo hay que pedir y decir que el Gobierno no quiere solucionar los problemas de los ceutíes. Imagínense lo que le queda al Partido Popular y al Gobierno hasta las elecciones de mayo…