Tal día como hoy, hace 35 años, los españoles refrendamos por absoluta mayoría nuestra Constitución, instituyéndose el Estado democrático que es hoy, y llegando así a uno de los puntos de inflexión más importantes de su historia reciente. Ésta Constitución de todos y para todos los españoles, fue capaz desde un primer momento de ser instrumento de unión. Este aniversario constituye una oportunidad para reivindicar los principios y valores que la Constitución consagra.
En la Constitución encontramos nuestra esencia como nación y como sociedad, nacida de nuestra cultura, entendida y juzgada con los valores de todos los españoles y no por su adaptabilidad a otros intereses que no sean los de toda la sociedad. Intereses que con el paso del tiempo y el cambio de nuestra sociedad, han evolucionado en paralelo a esta.
En conclusión, tenemos que recuperar aquel espíritu de 1978. Queremos una España unida. Buscar y encontrar los puntos en común. Rememorar aquel espíritu que siempre nos unió, como personas y no como sujetos, materializado en los ideales de paz, de justicia y de igualdad, por lo que respetando los derechos y las aspiraciones de todos los ciudadanos conseguiremos hacer de España la gran nación que un día fue, es decir, la Constitución que nos une.