Las quejas vecinales y el fuerte olor que desprendía el local aconsejaban que se llevara a cabo esta actuación para evitar futuros focos de insalubridad e infecciones.
Efectivos de limpieza enviados por la Ciudad Autónoma procedieron durante el día de ayer a limpiar el local de la carnicería de Mohamed Ahmed, más conocido como el Vasco, que hace diez días resultó calcinada por un incendio y desde entonces había permanecido cerrada. Precisamente esta circunstancia estaba provocando un olor “insoportable”, según los propios vecinos, que impedía que las personas pudieran estar a menos de 25 ó 30 metros del establecimiento. La intensidad del olor que despedía la carnicería era tan fuerte que tanto los comerciantes como la asociación de vecinos habían tenido que quejarse llegando incluso a hablar con los agentes de la Policía Local que se encuentran en el edificio del Polifuncional como con miembros de la Consejería de Sanidad. Todos recordaban que en el interior del comercio había carne, pescado y productos perecederos que se estaban pudriendo y que, junto con el olor a quemado, estaban empezando a crear una situación sanitaria “cuanto menos incómoda”.
Finalmente, durante la mañana de ayer efectivos de Medio Ambiente comenzaron unas labores de limpieza que requirieron de la máxima precaución y del uso de un equipamiento adecuado para impedir el contacto con algún posible agente infeccioso, dado el mal estado de los productos que se encontraban en el interior de la carnicería. De dentro de la misma se sacaron importantes cantidades de material y productos calcinados que fueron introducidos en unas bolsas rojas que luego se depositaron en el interior del vehículo de limpieza para que fueran trasladas a un lugar adecuado. Un inspector de Sanidad estuvo en el lugar para comprobar el estado.
De esta forma se cumplían los deseos vecinales y se evitaba que la situación sanitaria de la zona se viera comprometida por un atentado contra el patrimonio del Vasco que, durante unos días, lo ha sido también contra los vecinos de un barrio que ya está cansado.
Una situación insostenible
El problema con la carnicería del Vasco, que es la tercera vez en los dos últimos años que es quemada, proviene de una situación de falta de seguridad que tanto la asociación de vecinos como diferentes foros relacionadas con la barriada vienen denunciando desde hace tiempo. Una inseguridad que casi siempre hace pagar a justos por pecadores y que durante un tiempo provocó que la plaza en la que se encuentra la carnicería del Vasco estuviera ocupada por una unidad de la Policía que se encargaba de velar por la ciudadanía. Fue precisamente cuando se rebajó la vigilancia cuando aquellos que se la tienen jurada al carnicero aprovecharon para quemarle el negocio. Es una situación insostenible.