La Ciudad comenzó en el día de ayer a preparar un terreno junto a las pistas de pádel del parque urbano Juan Carlos I, situado en los bajos de la Marina, para convertirlo en una zona habilitada donde los dueños de perros puedan jugar con sus mascotas tranquilamente y sin molestar al resto de usuarios de las zonas de recreo. El área se encontraba baldía.
Por la mañana, fueron enviados varios operarios de la empresa municipal Obimace para iniciar los trabajos de acondicionamiento y atender de esta forma la demanda de la Asociación de Amigos de los Perros de Ceuta, recientemente constituida.
El viceconsejero de Equipamientos Urbanos y Barriadas, Gregorio García Castañeda, mantuvo un primer contacto con este colectivo hace escasas semanas y está previsto que vuelvan a reunirse en los próximos días, para perfilar juntos las características de esa zona de esparcimiento para mascotas. Aunque no está confirmado, es posible que sea el mismo lunes cuando mantengan la reunión y comparezcan ante los medios explicando lo acordado.
Según explica una nota de prensa emitida ayer por la Ciudad, de momento los trabajadores del Obimace han procedido a acotar el solar con un vallado perimetral con la finalidad de que los perros puedan estar sueltos sin causar perjuicios al resto de usuarios del parque urbano.
Además, los operarios municipales acondicionarán el piso con un producto especial para estos usos que se caracteriza por presentar una dureza menor a la del hormigón. De esta forma, se consigue que los caninos jueguen más cómodos.
Desde la Viceconsejería de Equipamientos Urbanos y Barriadas, institución que depende de la Consejería de Medio Ambiente, adelantan que el espacio reservado para los perros contará con mobiliario apropiado a tal efecto. Entre este equipamiento especializado se ubicarán varios sanecanes, unos pequeños contenedores adaptados que, además, tienen incorporados unos dispensadores de bolsas que los vecinos pueden utilizar para recoger los excrementos de los animales.