La Consejería de Medio Ambiente y Sostenibilidad ha decidido finalmente desistir de volver a licitar la gestión de la planta de descontaminación de vehículos de Benzú, que hasta ahora gestionaba la empresa Ibermad a través de una concesión, para dejar que este tipo de actividad se desarrolle única y exclusivamente en el ámbito de la actividad privada.
Sí lo ha explicado su titular, Emilio Carreira, que ha apuntado además que en Ceuta hay ya afincadas dos empresas, que se dedican de manera particular a realizar el desguace y separación de residuos de los vehículos fuera de uso, así como a tramitar su baja ante la Dirección General de Tráfico, sin ningún tipo de coste para el usuario. “Hay que dejar que la iniciativa privada también fluya y que no sea la administración local la que lo controle absolutamente todo”, explica el consejero.
La empresa que ha gestionado la planta en los últimos once años, Ibermad S.L., ha terminado definitivamente su contrato con la Ciudad y la idea que tiene la consejería es que esa planta “no vuelva a funcionar” y se deje a la iniciativa empresarial “porque en estos momentos ya son dos los talleres autorizados en Ceuta para descontaminar vehículos y podemos seguir autorizando a otras empresas siempre que cumplan los requisitos y que se deje a la iniciativa privada que cubra ese hueco de la actividad, que no tiene todo que ser la administración pública”.
De momento la planta sigue funcionando y está operativa, aunque a “coste cero” para la Ciudad, que ya no está pagando absolutamente nada por la gestión que se realiza de los vehículos. El objetivo es clausurarla definitivamente “y que no vuelva a funcionar”, pero mientras se resuelve la situación administrativa y se tramita la firma del acta de recepción de las instalaciones, ubicadas en las próximidades del perímetro fronterizo, en Benzú, y se formaliza su entrega a la Ciudad, la empresa sigue por su cuenta realizando el tratamiento de los coches que son dados de baja en Tráfico.
La planta de descontaminación funciona desde principios de diciembre de 2004 y con un coste para la administración local que ha ido rebajándose con los años hasta los 120.000 euros anuales. La empresa Ibermad fue la que resultó adjudicataria en ese momento de la concesión administrativa y ha estado gestionándola desde entonces hasta que a finales de 2013 expiró su contrato, aunque se prorrogó durante unos meses más. Con la puesta en funcionamiento de esta instalación, que ahora se va a clausurar definitivamente, Ceuta se sumaba al cumplimiento de la normativa medioambiental y directiva comunitaria en cuanto a la descontaminación y desguace de los vehículos fuera de uso, que obliga a que sean este tipo de talleres los que se encarguen de tramitar las bajas de los coches que sus dueños ya no utilicen, eliminando los elementos contaminantes, de manera que una vez tratado solo queda el chásis del coche, que una vez compactado, se traslada a la península. Según el contrato de la Ciudad con Ibermad, al año debía gestionar las bajas de unos 1.300 coches, pero en 2012 ya tramitó la baja de 2.569 vehículos al final de su vida útil, lo que significa un 63,5% por encima del techo previsto en el contrato, además de un 76% más con respecto al promedio de producción prevista.
La gestión del centro de tratamiento de vehículos, a través de una adjudicación, expiró en la legislatura anterior y desde entonces el área de Medio Ambiente había recibido varias propuestas de empresas locales para gestionarla a coste cero. Llegó incluso el anterior consejero a considerar la idea de municipalizar el servicio y rescatar la concesión y desde principios de 2014 se planteaba volver a licitarla la planta, que es de titularidad municipal, si bien con el paso de los meses la idea se fue desechando hasta que finalmente se ha desistido y se ha decidido clausurar las instalaciones.
Apuntes
Desde 2004
Instalaciones municipales
La planta fue construida a través de Procesa para cumplir con las directrices comunitarias sobre la descontaminación de vehículos
Gestión directa o no
Se llegó a plantear
La expirar la adjudicación durante la legislatura anterior, el Gobierno se llegó a plantear incluso asumir la gestión directamente , opción que al final ha sido desechada por completo
Empresas privadas
Gestores autorizados
Medio Ambiente de momento ya permite a dos operadores privados realizar las mismas tareas que hasta ahora está realizando la planta de Benzú. En ambos casos, al usuario no le genera ningún coste tramitar la baja de su vehículo y tampoco su descontaminación
Tratamiento
Beneficio empresarial
Se obtiene del desguace del coche y de la recuperación de aquellos elementos que pueden volver a ser utilizados y reciclados para otro vehículo. La empresa gestora puede comerciar con ellos como artículos de segunda mano, mientras también elimina los aceites y líquidos contaminantes, compacta el chasis y lo deja a otro gestor para su destrucción.