El grupo parlamentario Vox ha preguntado en el
pleno de control del mes de noviembre qué está haciendo la Ciudad, concretamente la Consejería de
Sanidad, Asuntos Sociales e Igualdad, con los
perros asilvestrados que están en zonas como el Monte Hacho o García Aldave. En su exposición de hechos, su portavoz, Carlos Verdejo, indicó que esta cuestión genera un ambiente de inseguridad a las personas que practican deporte al aire libre por estas zonas y que ven con preocupación como estos animales merodean, sin ningún tipo de control, aludiendo también a que se encuentran fuera de cualquier régimen de vacunación. Verdejo preguntó de manera directa qué acciones se han tomado al respecto y si se han contemplado medidas de captura y traslado a los centros autorizados de la Ciudad para su contención. Javier Guerrero, consejero del área, dio la razón al portavoz de Vox sobre la situación que actualmente se guarda con los animales salvajes. Explicó que hasta la fecha, se habían recibido 25 avisos por esta causa, llegando a capturar ocho perros en Monte Hacho y cinco en García Aldave, dos de ellos cachorro que lograron ser adoptados. En años anteriores se han llegado a capturar hasta 100 perros en esta situación. En este 2019 no hay constancia de ataques, aunque sí los hubo en 2018, a una mascota con dueño, que necesitó intervención veterinaria, y a otro de estos perros salvajes, que también fue atendido. Guerrero indicó que gran parte de la culpa de esta situación “la tenemos los seres humanos”, puesto que abandonan a los animales o bien les dan de comer, ayudando a proliferar este tipo de colonias asilvestradas. “Les damos de comer y potenciamos que hagan su hábitat en esta zonas”. Las medias que está tomando la Ciudad se han centrado en mantener contacto con los veterinarios militares, ya que muchas de estas camadas habitan en terreno militar, como es el caso de la Sirena, por lo que se necesita su ayuda para poder capturarlo. Asimismo, se ha contactado con una empresa especializada para la captura de estos perros, que cuentan con sistemas más selectivos. El consejero insistió en que también se trata de una responsabilidad ciudadana el no abandono, así como el no alimentar y ayudar a proliferar estas camadas.