Aunque todavía no hay fecha, la Ciudad ha confirmado que fijará una reunión con los representantes de las asociaciones del taxi para tratar la necesaria renovación del 15% de su flota actual, debido a que hay vehículos muy antiguos que no están en condiciones aceptables para prestar un servicio público.
El portavoz del Ejecutivo, Jacob Hachuel, informó ayer de que el encuentro tendrá lugar con miembros de las áreas de Turismo y Sanidad para analizar varios asuntos. Uno de ellos es el de la renovación pero también se trataría otros temas como el de una posible uniformidad para los profesionales del taxi al objeto de que se dé una imagen turística mejor. En el tintero está también el estudio de un incremento en el precio del trayecto que no tocaría el precio de la carrera mínima pero sí de los complementos. Esta medida será abordada por la Ciudad para estudiar si, de ser razonable, podría ponerse en marcha. Sobre la presión que representan los taxistas piratas para el gremio, no habrá una persecución policial en concreto sino que dentro de la reorganización que se espera dar a la Policía Local, se reforzará la persecución de los delitos urbanísticos entre los que se incluirían los taxis piratas.