La Chimenea niega que Obimace haya pintado sus paredes

Su presidente sostiene que realizaron este trabajo con fondos de su comunidad.

Mohamed Ahmed, presidente de La Chimenea, desmintió ayer a Gregorio García Castañeda, director gerente de Obimace, a propósito de las labores de adecentamiento y pintura de las zonas comunes en las naves del Tarajal.
El portavoz de la empresa municipal explicó esta semana que los operarios pintaron las paredes del recinto porque se encontraban sucias y cubiertas de grafitis. Sin embargo, Ahmed sostuvo que estos trabajos se financiaron solo con los fondos de la Comunidad de Propietarios de La Chimenea, “precisamente, el polígono en el que había más pintadas”.
La limpieza protagonizó esta semana otro desencuentro entre este portavoz de los propietarios de los cuatro polígonos y los representantes de la Ciudad Autónoma en esta materia: Arturo Santorum, coordinador general de servicios en los polígonos del Tarajal, y el propio García Castañeda. Ambos anunciaron la incorporación de nueva maquinaria a la plantilla permanente en el recinto que, precisó el máximo representante de Obimace, consistirá en otro camión compactadora y una cuba de 7.000 litros.
El baldeo de las calles de los polígonos es “nulo” desde noviembre de 2007 –cuando se activó el servicio de Obimace–, denunció de forma pública Ahmed, quien aseguró que desde entonces “no se ha echado ni un cubo de agua al suelo”.
El asfaltado del carril que conecta Príncipe Felipe con el polígono de La Chimenea se convirtió en otra de las reivindicaciones en las que persiste Ahmed, especialmente, “porque García Castañeda se comprometió el pasado 15 de mayo y el propio presidente del Gobierno autonómico lo ratificó poco antes de las elecciones”. Los comerciantes preguntan a diario a Ahmed “si la Ciudad atenderá su demanda o será otra promesa incumplida”.
Por otra parte, el portavoz de la Comunidad de Propietarios de los Polígonos del Tarajal aseguró que unos desconocidos continúan arrojando chatarra por la ladera de la semivaguada de los terrenos de Jomasa donde ya se acumula el chasis de otros vehículos. Ahmed alertó de que, entre la 1:00 y 2:00 de la madrugada, los motocarros aparecen en la zona y tiran los coches desguazados. “Esta semana ocurrió el miércoles por la noche”, señaló.
La Consejería de Medio Ambiente, informaron esta semana Santorum y García Castañeda, gestiona la recogida de los chasis arrojados en la zanja colindante con La Chimenea, polígono que preside Ahmed. Unos residuos que requieren de un tratamiento específico que el departamento que dirige Emilio Carreira tramita en estos momentos pero cuyo efecto no es inmediato. Un vertedero ilegal que, como ya advirtió este comerciante, supone un riesgo ya que los ladrones pueden trepar por la chatarra hasta los tejados de las naves con el robo como fin.