La historia que parecía convertirse en una alegría definitiva para
Kiara se ha tornado en una situación de desesperación continua.
Si Kiara, hace apenas un mes, abrazaba una nueva y definitiva vida a mediados de mayo, el infortunio se ha sobrevenido sobre la vida de esta pobre y maltrecha perrilla, marcada por el abandono.
Parecía haber encontrado con Lourdes, en Mijas Costa, una oportunidad de dejar atrás sus antigua vida y encarar con mejor perspectiva una nueva. Sin embargo esta nueva buena vida se ha dado de bruces con un mal diagnóstico por parte de su adoptante, una discapacidad de grado 1 con una operación pendiente que le impide hacerse cargo de las especiales necesidades que Kiara precisa, y que incluyen baños semanales con una champú específico para su dermatitis, medicación y alimentación especial para hacer frente a su problema renal y su anemia, además de paseos frecuentes.
Una operación a finales de mes por una discopatía degenerativa impide a Lourdes poder ocuparse de Kiara con las atenciones que ella precisa; es una vida limitada que le obliga a un gran grado de dependencia que, incluso, precisa ayuda externa para el desarrollo de su vida. En estas condiciones, Lourdes se ve incapacitada para dar los paseos que tanto necesita Kiara así como sus baños semanales para luchar contra esa dermatitis que tanto dolor y picor le producen.
Ahora, la
Protectora de Ceuta ha volcado todos sus esfuerzos en buscar una nueva
adopción. Acudieron a la llamada de Lourdes y fueron a por ella a Mijas. Actualmente Kiara se encuentra en casa de acogida, a la espera de una familia donde pueda pasar el resto de sus días con la tranquilidad y el cariño que tanto merece esta abuelita de cruce de pastor alemán con la nobleza tatuada no ya en sus ojos, sino en su mirada, que pide a gritos un hogar donde conocer, al fin, esa estabilidad tan anhelada para ella y esa buena suerte que parece ser tan esquiva con ella, pero de la que estamos seguros que terminará encontrándose en la misma senda de esta pequeña gran perra, hecha de retales de nobleza y a la que las malas experiencias con las personas no parecen haberle pasado cuenta negativa en su trato hacia ellos.
Actualmente y pocos días después de que la Protectora publicara el post con la solicitud de acogida para ella, Kiara consiguió un hogar temporal hasta que, con paciencia y cuidado, consigan esa casa y esa familia en la que se pueda atender de forma óptima los requisitos de cuidado que requiere.
Si estás interesado en adoptar a Kiara, entra en contacto con la Protectora de Ceuta o llama al teléfono 649 118 233.