La Junta de Personal Docente No Universitario de Ceuta ha presentado este martes en rueda de prensa la campaña de recogida de firmas que ha puesto en marcha en todos los centros públicos de la ciudad con el objetivo de que en dos o tres semanas los docentes respalden una serie de “exigencias” al Ministerio de Educación y Formación Profesional (MEFP).
Si la administración no se muestra “receptiva” a ampliar recursos para atender al alumnado con necesidades educativas especiales, a eliminar burocracia “innecesaria” o a reducir su jornada lectiva semanal, antes de fin de curso se encontrará con “concentraciones” y, probablemente, una “huelga”.
“Esperamos que firmen todos los maestros y profesores para que el MEFP entienda de una vez que no puede seguir haciendo oídos sordos a los problemas de esta ciudad”, ha explicado el presidente del órgano de representación, Francisco Lobato.
En el documento que ya circula por colegios e institutos se hace mención a las carencias de personal para atender “dignamente” al alumnado con necesidades educativas especiales, a la falta de desarrollo de la política que abandera el MEFP para restituir derechos mutilados por el PP, a la burocracia “excesiva” que recae sobre los docentes, a las ratios elevadas de la ciudad…
“Lo que pretendemos es que los docentes exijan al ministerio el cumplimiento de sus obligaciones”, ha resumido el ugetista, que ha lamentado la política de “oídos sordos” del departamento que dirige Pilar Alegría, frente al que se ha diseñado una “escalada” de movilizaciones. “No somos solamente los sindicatos los que reclamamos estas mejoras, sino todos los docentes de la ciudad, y queremos que el ministerio lo sepa”, ha indicado Lobato.
Los problemas que plantea la recogida de firmas comienzan por la implantación de la LOMLOE, “con la que los docentes y los equipos directivos de Ceuta nos hemos tenido que buscar la vida, ya que no se ha hecho ninguna actividad para dar a conocer la normativa a través de cursos, jornadas o comunicaciones”.
“El MEFP está incumpliendo, en un alarde de incoherencia, su propia normativa, como en relación con la disminución a 23 y 18 horas de la jornada lectiva semanal de maestros y profesores en colegios e institutos que se recomienda encarecidamente y las autonomías ya están aplicando”, ha ejemplificado el presidente de la Junta.
Carencia de personal para atender al alumnado con necesidades especiales
Persiste también la carencia de personal para atender al alumnado con necesidades especiales, más acusada para los estudiantes con trastornos del espectro autista (TEA) ahora que se prescribe atención individualizada en aulas ordinarias. “Esto está creando un caos en los centros, los docentes están exhaustos y frustrados, los alumnos con necesidades especiales no están bien atendidos y sus compañeros sufren las consecuencias”, ha resumido.
Por si fuera poco, los docentes deben hacer frente a una carga burocrática desmedida. “En muchas ocasiones se exige un papel para cualquier reunión o apoyo, con lo que al final el docente necesita dos o tres horas diarias para hacer papeleo, algo que denota falta de confianza en la profesionalidad de los maestros y profesores”, ha criticado. “Todo esto se complica por las ratios elevadas, que multiplican los problemas”, ha concluido Lobato.
Lo que se reivindica al MEFP es establecer una jornada lectiva semanal de 23 horas efectivas en Infantil, Primaria y Especial, así como de 18 en Secundaria, FP y Bachillerato. También rebajar la de los mayores de 55 años y contar con más recursos cualificados “para una verdadera, eficaz y digna labor de inclusión”. Además hay, estima la Junta, que “eliminar el papeleo innecesario y reiterativo restituyendo la confianza en la profesionalidad de los docentes y dejar las falsas promesas poniendo en marcha las medidas necesarias para disminuir las ratios”.
Negociación “paralela”
“Tenemos abierta una negociación con el MEFP para reactivar las reuniones del Grupo de Trabajo, que está prácticamente muerto, con el fin de abordar retribuciones económicas y condiciones laborales que queremos mejorar para actualizar complementos específicos y elevar la cuantía de los sexenios”, ha reseñado Lobato.
Igualmente se quiere “actualizar” los permisos y licencias retomando el derecho a las mismas para estudiar, a recibir ayudas para la formación, a recortar jornadas por interés particular como en otras comunidades, a ampliar plantillas de forma fija y desde el 1 de septiembre con personal no docente (enfermeras, trabajadores sociales, técnicos de Infantil, administrativos… que ahora proceden del Plan de Empleo o el Convenio Ciudad-MEFP).
La Junta también querría que se convocase tras el Concurso de Traslados un ‘concursillo’, que se actualizasen los Reglamentos Orgánicos de Centro (con más de 25 años de antigüedad) o que se crease el Conservatorio de Música con carácter “oficial” como en Melilla.
“Son dos planos paralelos, pero distintos: una recogida de firmas para exigir al MEFP que cumpla con sus obligaciones y una lista de demandas laborales y salariales que deseamos negociar”, ha recapitulado Lobato, que considera que sería “de traca” que el ministerio no atienda ni a las reivindicaciones suscritas por “todos” los docentes.