José Antonio Pérez Avilés nació en Granada hace 53 años, pero se hizo caballa hace ya 22. Ese es el tiempo que llevaba viviendo en Ceuta, a la que llegó primero por amor y después se quedó por trabajo. Este hombre “divertido y muy amigo de sus amigos” es tristemente una nueva víctima del coronavirus en nuestra ciudad, la número 95.
“Era un ceutí ya de corazón, llevaba sangre caballa”, cuenta ‘Clemen’, su hermana, a este periódico, quien llegó el pasado sábado a nuestra ciudad después de que José Antonio fuera ingresado en el Hospital tres días antes, el miércoles. Ha fallecido este lunes en la UCI.
José Antonio había nacido en Granada, pero ya superada la treintena Ceuta apareció en su vida. “Él decía que era granadino de nacimiento, pero ceutí de adopción”, cuenta ‘Clemen’ con lágrimas en los ojos, recordando al que era su hermano mayor, el mayor de los cinco que son.
Gran apasionado de la lectura, José Antonio era especialmente apasionado de la lectura tradicional, en papel, como los periódicos. No faltaba el día que hubiera en su casa un diario en papel. Madrugaba incluso para que así fuera.
Él llegó a Ceuta tras conocer a una chica que era de Tetuán (Marruecos), pero le gustó la ciudad, encontró trabajo y acabó quedándose, estando prácticamente siempre en el sector de la madera, donde fundó su empresa ‘Ceutablock’ con un socio. A ella le dedicó todos los años desde entonces hasta ahora, en su fallecimiento con tan solo 53 años de edad, poniendo de manifiesto la dureza de este virus, que afecta también de forma mortal a no solo personas de avanzada edad.
Lo más duro, cuenta también su hermana, es que José Antonio deja un hijo de 12 años, con el que vivía en el Mixto, aunque él antes residía en la zona centro de la ciudad, en La Marina.
Tras pasar 10 días confinado en su vivienda, ya habiendo sido positivo por coronavirus, la carga viral de esta maldita enfermedad fue yendo a más en su cuerpo y tuvieron que trasladarle el pasado miércoles, día 24 de marzo, al Hospital. Allí, en UCI, ha estado hasta que falleció al mediodía de este lunes, convirtiéndose en la víctima número 95 de la pandemia en Ceuta.
Su familia, muy emocionada, le recuerda con el inmenso cariño que se rememora a una persona tan querida. Con gran pesar, su hermana -que ha viajado hasta Ceuta ante tal motivo- se va con la pena de no haberle visto en más de un año por culpa de las restricciones de la pandemia. Ese es el otro drama: familias rotas que ni han podido ver a seres queridos a causa de una situación que no cesa de dejar dolor en Ceuta.
Me quedé mudo al enterarme de que te habías ido . Me dejas con una tristeza muy grande , irte así de repente. Descansa en paz compañero.
Dep amigo
Hasta siempre amigo
Descansa en Paz "Madera"
ESKERRIK ASKO Amigo!!! Descansa en Paz!!!!
Te echaremos de menos