El Colegio San Agustín de Ceuta realizará este viernes una jornada solidaria de ayuda a Ucrania que comenzará en el patio del centro, a las 13:00 horas, con la actuación del cantante de música cristiana Nico Montero, un gaditano con varios discos de oro y con una larga historia en común con la música religiosa.
Según ha explicado el responsable del colegio, el padre David Díez, esa será la mejor forma de invitar a los padres de los alumnos e introducirlos en una fiesta que se prolongará durante el resto del día.
Primero, se montará una barra para quien quiera comer y beber. No habrá carne para respetar el tiempo de cuaresma, pero sí otros muchos platos, como calamares, atún, tortilla o garbanzos con chopo.
La barra permanecerá abierta durante toda la tarde para que los padres puedan tomar una copa después de la comida mientras los niños juegan en el castillo hinchable que se montará para la ocasión.
Posteriormente se llevará a cabo la rifa, cuya papeleta se venderá al precio de cinco euros. Además, según ha confirmado Díez, solamente se sortearán los regalos entre los boletos que se hayan vendido, con el objetivo de que ningún premio quede desierto.
El responsable del centro calcula entre 20 y 30 los presentes que se repartirán. Entre ellos, destacan una cámara de fotos cedida por Canon, un reloj procedente de la Joyería Benítez y diversas prendas de ropa de tiendas como La Meca, Boutique Club o Mariola.
De la misma manera, se sortearán dos cestas por valor de 50 euros para gastar en Xocolat y La Boutique del Jamón, y un robot de limpieza ‘rumba’ cedido por Limpiezas Ceuta.
Igualmente, habrá ganadores de cenas en locales de la ciudad como el Hotel Ulises, el restaurante Oasis o el mesón La Esquina Ibérica.
Una camiseta de la Selección
Además, habrá un premio especial, que será una camiseta de la Selección Española de fútbol firmada por todos sus jugadores.
Otras empresas de la ciudad, como Covirán, Apolo, Doncel o San Pablo también participarán en la iniciativa, cuyos beneficios se destinarán a una ONG de los agustinos en Polonia llamada Reda, que se dedica a arreglar casas para acoger en ellas a refugiados ucranianos. También se contará con las donaciones de los particulares, en este caso los padres de los niños del colegio, para completar la cesta.
De cualquier forma, como ha declarado el padre David Díez, “todo esto merece la pena para ayudar a los ucranianos”.