Los técnicos encargados en Ceuta de supervisar el borrador de nuevo convenio colectivo que UGT exige aprobar sin ningún cambio para Obimasa han hecho contar en sus notas internas que contiene varios puntos de dudosa o imposible implementación atendiendo exclusivamente a criterios legales.
Se trata, según las fuentes de la administración consultadas, de apartados relativos a la jornada laboral de la plantilla, algunos pluses y, sobre todo, un nuevo organigrama que pretende consolidar superiores categorías con nombres y apellidos hasta con dos saltos.
El texto al que se aferra UGT, que cuenta con tres de los cinco delegados del órgano de representación de la plantilla de la sociedad municipal (los otros dos son de CCOO, que ha apostado por “negociar”) estipula que “los trabajadores de Obimasa tendrán una jornada laboral de 35 horas semanales” que “se establece de forma genérica de 8.00 a 15.00 horas de lunes a viernes”.
Actualmente los empleados públicos deberían hacer 37,5 horas por semana, aunque en muchos casos ese requisito se regatea apelando a la ‘bolsa’ que permite rebajar su jornada de hecho a 35, pero en el proyecto de convenio de Obimasa no se recoge siquiera ese maquillaje.
Sí se contempla, sin embargo, la creación de “un plus de puesto de trabajo por importe de 50 euros mensuales” para “aquel personal que realice actividades en un único turno de mañana” y que comenzaría a devengarse “a partir de enero de 2022”.
La revisión técnica del texto no ve posible pagar un extra al personal que acude a su puesto en el horario en el que debe hacerlo.
Los mayores reparos los ha suscitado el nuevo organigrama que, con nombres y apellidos, se pretende implementar por la vía de la negociación y sin procedimientos de promoción interna “basados en los principios de igualdad, mérito y capacidad”.
La propuesta de convenio alumbra una estructura con un director de área; cuatro técnicos; un jefe de administración; otro de equipo; más de veinte expertos y oficiales de primera; una docena de auxiliares, oficiales de segunda y ayudantes; seis conservadores y solo siete peones.
Dicho plantel introduce cambios con “superiores categorías consolidadas, no por movilidad funcional, que en algunos casos recogen sentencias que dan derecho a cobrarlas y no a ocuparlas, pero en otros no, e incluso ascensos de dos categorías de un solo paso, algo que no se contempla legalmente como pasar de un grupo C2 al B”.
UGT advirtió la semana pasada que si este lunes no hay “ninguna señal de que esto avanza” sin “cambiar ni una coma” volverá a convocar movilizaciones.
Salarios base de entre 2.790 y 1.117 euros y 9 complementos diferentes
El proyecto de nuevo convenio colectivo en el que los técnicos de la Ciudad aprecian contenidos legalmente inaplicables prevé una nueva tabla de salarios base que irían de 2.790 euros mensuales para el director de área a 1.117 para los peones.
Además, contempla nueve pluses distintos de entre 100 y 50 euros mensuales. Los mejor pagados serían los de turnicidad y productividad, pero también los habría de transporte (90), especial responsabilidad (80), peligrosidad, toxicidad (75 en cada caso), nocturnidad (70), destino (60) y administración general (50).
El texto prevé que “el trabajador que distribuya la jornada de trabajo entre mañana y tarde, siempre de conformidad con la Dirección y el Comité de Empresa, percibirá en cada una de las doce pagas ordinarias la cuantía del 20% sobre el salario base”.
También que cada trabajador percibirá anualmente dos pagas extraordinarias, consistentes en una mensualidad compuesta, cada una por el salario base, antigüedad y residencia que se abonarán los días 15 de junio y 15 de diciembre.
En el apartado de condiciones sociales se prevé un ayuda de 250 euros por natalidad, matrimonio, separación, constitución o disolución de pareja de hecho o divorcio.
Sus dietas para viajes se establecen en 60 euros para manutención y un máximo de 140 para alojamiento.
Pues haber si cambian el convenio de limpieza de edificios que cobran salario base 840 eur cuando lo estipulado es 1000 o 1050 que hay mucha gente perjudicada