El teniente coronel de la
Guardia Civil, David Oliva, quien fuera jefe del OCON Sur y responsable de cuantiosas operaciones enmarcadas en la lucha contra el
narcotráfico desarrolladas en el
Campo de Gibraltar y en Ceuta, tendrá que declarar este miércoles en calidad de investigado ante la Audiencia Nacional. Esta unidad ha sido la responsable de importantes operaciones en todo el sur peninsular y en nuestra ciudad como fue el caso
de la mediática Perla Costa, erigiéndose en el azote del Ministerio del Interior contra el narcotráfico. La unidad de elite, que terminó siendo desmembrada
por Fernando Grande-Marlaska, se encargó de la detención de gran número de personas por delitos de tráfico de hachís y variables como el blanqueo de capitales o la organización criminal. Oliva tendrá que prestar declaración este miércoles y en el listado de personas llamadas a declarar se incluyen a otros mandos del Instituto Armado como parte de una investigación llevada a cabo por Asuntos Internos en la que asoman delitos como el de revelación de secretos. Así se tomará declaración a dos tenientes con responsabilidad en la zona del Estrecho.
Investigación en marcha y posteriores consecuencias
De esta investigación y de la posterior toma de declaraciones que tendrán lugar en las próximas horas no se descartan nuevas consecuencias. La lucha del OCON Sur contra los narcos afectó directamente a Ceuta con operaciones continuadas en las que tomaba parte este grupo integrado por agentes desplazados desde la Península pero que contaba con apoyo de efectivos de nuestra ciudad. Oliva dirigió y coordinó varias operaciones durante el periodo de responsabilidad al frente de este grupo, también las realizadas en Ceuta. Ahora tendrá que declarar en calidad de investigado ante la
Audiencia Nacional aunque no se han concretado más detalles al respecto y si de fruto de esas manifestaciones se derivan repercusiones en operativos locales. La información ha causado un auténtico revuelo en una Guardia Civil salpicada de cuantiosas polémicas en los últimos meses.
Un año de investigación
Estas consecuencias judiciales no se han producido por sorpresa, sino que son fruto de una investigación que se lleva desarrollando desde hace un año por parte de Asuntos Internos. Se habría denunciado la existencia de presiones para que otros agentes dieran información sobre detalles de investigaciones en curso en torno a operativos en el Estrecho. Otros dos mandos del Cuerpo deben prestar declaración. En la investigación se cuenta con la denuncia de otro agente destinado en su día en Asuntos Internos que puso de manifiesto la existencia de presiones para aportar datos sobre operativos. Ha trascendido que específicamente un teniente de la Guardia Civil está también citado a declarar por presunta revelación de secretos. Al parecer Oliva, al que le llegó un rumor de que estaba siendo investigado por Asuntos Internos, recurrió a este teniente, destinado en esa unidad, para averiguar si eso era cierto.