Si a esto le añadimos la convulsión en la que vive Marruecos, y en concreto su cuerpo aduanero, desde que el pasado diciembre la dirección general de inspección y tributos de Tánger se cargara de un plumazo a la mitad de los agentes al tener conocimiento de varias operaciones ilícitas, el resultado es más que evidente: tensión. Es decir: acumulación de porteadoras, intentos de convertir el Tarajal en un segundo Biutz que funcione por la tarde, quejas de los comerciantes y pique entre fuerzas de seguridad por las competencias de cada uno.
“Desde primeros de diciembre la intensidad de los porteadores ha sido mayor no sé, quizá sea por la crisis, pero usan más horas del día y quieren portear también por la tarde. No es que nosotros no le dejemos pasar sino que son ellos mismos los que no quieren hasta que no cambie el turno de la Policía aduanera que les sea más favorable”, resalta el jefe superior de la Policía Nacional, José Luis Torres.
Se refiere el mandatario policial a la actuación que, desde finales del pasado año, está llevando a cabo la Policía en el Tarajal. Dice que la fuerza bajo su mandato cumple órdenes de la Delegación del Gobierno y que se limita a impedir que la frontera del Tarajal sea empleada para el tráfico de mercancía también por la tarde.
Los comerciantes no pueden estar más molestos con la situación. “Estamos, no cabreados, si no súper cabreados. ¿Esto qué es, Mozambique, Haití?, ¿cómo se entiende que sea nuestra propia Policía la que impida que salgan los bultos, le están haciendo el trabajo a Marruecos. El comisario no es aduanero ni tiene por qué saber lo que va a pasar, tienen que dejar que salga la mercancía y allá Marruecos con sus problemas”, advierten. “Esto es una frontera española, aquí no se tiene por qué retener a nadie, ni prohibir la salida como se está haciendo”, añade otro de los comerciantes del polígono que, asegura, quieren ir en bloque a hablar con el jefe superior de Policía para trasladarle sus quejas.
Torres asegura que no ha recibido ninguna, y que la Policía se centra en el cumplimiento de las normas protocolarias que se pusieran en marcha tras el fallecimiento de dos mujeres en el Biutz, hace un par de años.
“Ellas” -se refiere a las porteadoras- “se bajan al Tarajal para pasar los bultos que no pueden pasar por el Biutz, han cogido la costumbre de pasar por aquí pensando que la Policía marroquí puede ser más light. Ya no solo lo hacen a la una de la tarde, sino también por la tarde. El Biutz se hizo precisamente para evitar esto y ahora estamos volviendo a lo mismo”, indica Torres.
Hace más de dos años que la Delegación del Gobierno dio traslado, vía Interior, a Marruecos del plan ideado para rediseñar la frontera, mejorar el paso actual y ampliar el reducido Biutz. ¿Respuestas? Ninguna. Ni han llegado ni llegaron. Los problemas no sólo siguen, sino que se amplían. Los porteadores siguen entrando y, ahora, también lo hacen en los llamados ‘coches de combate’, que intentan regresar a Marruecos cargados hasta los topes de mercancía.
La inspección marroquí que ordenó la destitución, el pasado diciembre, de la mitad de los aduaneros localizó en Castillejos varios lotes de mercancías que habían sido introducidas por esta vía. Los aduaneros recién nombrados tienen miedo y cumplen la norma a rajatabla, de ahí que los controles sobre los porteadores sean cada vez mayores. Estos ‘coches de combate’ también provocan a su vez retenciones. “Por nosotros como si cierran ya esto. La gente se cree encima que nos estamos haciendo de oro y cada vez son peores las ventas. Nosotros mismos nos ponemos las trabas impidiendo que salga la mercancía por donde tiene que salir. Marruecos funciona del carajo, donde ponemos los problemas es aquí”, critica un comerciante que, recuerda, de cada venta que llevan a cabo en el polígono la Ciudad se lleva su tanto por ciento en concepto de impuestos. “De esto no se acuerdan ¿no?”.
La Asociación Unificada de Guardias Civiles -AUGC- señala que cada Cuerpo tiene sus competencias y reclama una clarificación de funciones en la zona.El malestar entre policías que consideran que no deben estar haciendo unos funciones que no les competen y guardias que se sienten atacados por quienes, desde el anonimato, les acusan de no trabajar es evidente.
“El control de mercancía como tal, como régimen aduanero, le corresponde a la Guardia Civil”, aclara el jefe superior Torres. “Si me pueden decir un solo paquete que nos hayan visto abrir a nosotros... pues yo agacharé las orejas. No abrimos ningún paquete, nuestra misión es orden público, ahora sí, hay una orden del delegado del gobierno que la dio en presencia de la Guardia Civil de que había que controlar el tamaño de los bultos para evitar esas caídas o esos posibles ahorcamientos, que se produzcan avalanchas porque no se pueden levantar si se caen. Controlamos el tamaño de los bultos para evitar esos problemas de orden público, si alguien puede decir que hemos abierto un paquete que lo diga... y eso que lo podemos hacer porque tenemos competencia en armas, drogas, terrorismo... y cualquier paquete de esos puede contener cualquier otra cosa... Sin embargo no lo abrimos y entra dentro de nuestras competencias. Estamos actuando en nuestras competencias”, señala. “Yo no soy responsable de que haya venta ambulante ahí y se acumule la gente, ni de dirigir el tráfico en la rotonda... lo que hacemos es notificarlo al 112 para que lo notifique al cuerpo que le corresponda. Si luego va o no... nosotros no somos responsables”, recalca. “Los problemas de venta ambulante, de descarga de furgonetas grandes con mercancía a donde se tiran los porteadores para recogerla o de dirigir el tráfico en la rotonda no le corresponden al Cuerpo Nacional de Policía”, deja claro. “Nosotros cumplimos nuestras obligaciones dentro del marco constitucional. Marruecos hace lo que cree oportuno. Los demás Cuerpos sabrán si están o no cumpliendo, yo no voy a criticar la actitud de cada uno”.
Torres niega replica a las críticas de los comerciantes, asegura que no se están quitando las bolsas pequeñas y que no son responsables de las colas de tráfico: “Quién más quiere que nosotros que la frontera este limpia. Los aduaneros registran hasta las bolsas pequeñas”.
La Guardia Civil le responde: está trabajando en la zona igual que siempre. Sin alharacas públicas trasladará los informes oportunos en los foros adecuados.
Una historia que se ha contado día a día
12 de diciembre. Tras varias semanas de masificaciones en el entorno fronterizo, este medio publica en portada y a doble página los desalojos que están llevando a cabo la Policía Nacional en la frontera. Se reflejaba la situación de tensión que se estaba produciendo en el paso. El propio José Luis Torres, jefe superior, reconocía a este medio -ya el año pasado- que se había tenido que desalojar, de noche, a unas 60 porteadoras. Aquel tema, denunciado por ‘El Faro’, se abordó en una reunión mantenida, el mismo diciembre, entre el delegado del Gobierno y el propio presidente de la Ciudad además de los mandatarios policiales, en un repaso de la situación que en materia de seguridad afecta a la ciudad. En las imágenes se reproducen las informaciones de una problemática seguida día a día. Son hechos que reflejan una realidad clara.
24 de diciembre. Se apunta al origen de la situación al publicarse la intervención llevada a cabo por la comisión central de investigación en plena frontera. Esto se traduce en la destitución de varios aduaneros.
Enero. Siguen los problemas, siguen los atascos y retenciones que van a más por las rebajas y la mayor llegada de marroquíes y aparecen los malestares entre miembros de las distintas fuerzas de seguridad por el roce de competencias. Los comerciantes añaden sus críticas: aseguran que se les está perjudicando y que desde la propia España se está poniendo trabas a su trabajo. Incluso, recuerdan, optarían por el cierre del Biutz ante la situación en que se encuentran sus negocios.
Los pases de favor a marroquíes han aumentado un 18% en un año
La frontera del Tarajal como tal es inservible, anticuada, incapaz de absorber unos flujos cambiantes y una presión como la registrada ya no sólo el pasado año sino este mismo, con motivo de las rebajas. Según datos oficiales, sólo el pasado año se dispensó un 18% más de pases de favor, es decir, aquellos que autorizan la entrada de marroquíes que van a estar en Ceuta sólo ese día, sin derecho a pernoctar, porque se supone que vienen a comprar o a la realización de algunas tareas. En cifras se refiere a 16.000 personas, al margen de los porteadores. Sólo en los primeros días del año se ha detectado además un aumento notable de marroquíes que vienen estrictamente a comprar atraídos por las rebajas. ¿En cifras?, unas 1.000 personas. Este es el turismo marroquí que tenemos y que soporta una frontera incapaz de canalizar con la agilidad que se requiere no solo la salida y entrada ágil de ese cliente marroquí sino la de todo el comercio que se genera en su entorno. La tendencia apunta a un tráfico cada vez mayor que la actual infraestructura es incapaz de asimilar.
3 Ideas sobre un problema:
Porteadores:
1 - Se les ha impedido el traslado de mayor cantidad de bultos por el Biutz ante los cambios habidos en el Cuerpo aduanero. Por eso buscan hacerlo también por la tarde, apoyados incluso por vehículos cargados hasta los topes de mercancía. Esto ha hecho saltar la alarma. Desde Delegación no se va a permitir que el Tarajal sea un segundo Biutz, por lo que las órdenes de impedir el tránsito de grandes bultos van a continuar. El problema está en cómo se están aplicando esas medidas y en el caso que a las mismas hagan las porteadoras.
Fuerzas de seguridad:
2 - Se quiere impedir por todos los medios que se vuelva a producir otra tragedia, esta vez en el tubo que canaliza el regreso de los marroquíes a su lugar de origen y residencia. Se teme el colapso que pueda producirse en una vía de paso empleada por miles de personas, sobre todo cuando por esa vía se intentan pasar bultos de gran tamaño. Las reuniones internas entre fuerzas de seguridad no sólo se producen sino que se van a seguir produciendo para que los mandos pongan encima de la mesa las discrepancias que pueda haber en la forma de llevar los asuntos.
Comerciantes
3 - Aseguran que las directrices que se están adoptando en los últimos meses son las causantes de que se estén produciendo más colas y retenciones. Esta misma semana mostraba su malestar la Confederación de Empresarios, también lo hacía el Centro Comercial Abierto y los propios comerciantes del Tarajal. Nadie está contento porque consideran que no se están dando facilidades a los compradores ni a los porteadores. En algo todos parece que coinciden: la frontera, como tal, no es apta para canalizar el flujo actual. Hasta la Delegación del Gobierno lo sabe pero quien tiene el 50% de la voz, Marruecos, no acepta actuación alguna. Esta semana se volverá a hablar sobre la situación fronteriza.