Ismael Lemais e Isita Díaz son pareja tanto en el ámbito personal como profesional. Comenzaron haciendo vídeos de seis segundos en Vine y ahora llenan teatros. Este domingo llegan a Ceuta, concretamente al teatro del Revellín con su show ‘Madre mía’, donde muestran situaciones muy reales que viven ahora que son padres.
Lemais es quien nos habla en esta entrevista en nombre de los dos para contarnos más de su historia y su espectáculo.
– Este es su segundo espectáculo después de estar de gira con ‘Como conocí a mi suegra’. ¿Qué presentan ahora con ‘Madre mía’?
–Un poco la evolución de ‘Como conocí a mi suegra’. En ‘Como conocí a mi suegra’ lo que pasaba era las cosas de pareja, digamos de novios, de cosas de novios. Y ahora, hemos tenido una niña y contamos qué nos ha cambiado en la vida desde que somos padres prácticamente.
–Ya llevan unos meses de gira con este espectáculo. ¿Qué acogida está teniendo por parte del público?
–La verdad que estamos muy contentos. Muy, muy, muy contentos porque todo el mundo nos dice que es súper real, es súper cercano y salen muy contentos.
Incluso, la gente que no es padre, ni madre, ni nada, sale del espectáculo diciendo, “joder, vaya espectáculo más chulo y ahora entiendo a lo mejor a mi hermana o entiendo a mi padre o a mi madre o a mi hermano o a mi tío que acaba de ser padre y están pasando por esos problemas que me acaban de contar”. A ver, no son problemas, son situaciones del día a día.
Estamos muy contentos porque en ningún momento nos íbamos a esperar cuando estábamos haciendo el show que iba a tener tan buena acogida.
"Al final estamos juntos y como no le eches paciencia y ganas, no vas a ir a ningún lado"
– ¿Cómo fue ese salto de la pequeña pantalla a llenar teatros? ¿Esperaban llegar a esto?
– La verdad que no. Y el camino no es, digamos, fácil, pero poco a poco se van consiguiendo cositas. Estamos muy contentos también por esa parte, porque en ningún momento me hubiera visto montado en un escenario. Si acaso desde los controles, que es lo que yo estudié y controlando a alguien que cante o a alguien que tal, pero no haciéndolo nosotros.
Después empezamos en bares y en sitios pequeñitos y al final pues va creciendo, va creciendo, va creciendo y joder, que da un vértigo desde arriba que no veas. Pero muy contentos, la verdad.
–Y mientras tanto continúan con sus publicaciones en Instagram. ¿Cómo surgen esos vídeos?
–Hay algunos que son naturales y otros que sí que son preparados. Se entiende si ve los vídeos. Por ejemplo, si vamos a algún sitio y surgen cosas graciosas y las grabamos, lo montamos y lo subimos tal cual.
Después están los que sí que están preparados, está guionizado y está hecho para que la gente que lo vea se sienta identificado y lo comparta si ellos quieren.
Pero los otros no, los otros es que nos parece gracioso a nosotros y los subimos, pero al final son cosas de nuestro día a día que subimos y a la gente le hace gracia tanto una cosa como la otra.
–Como dice, son situaciones reales que nos pueden pasar a todos, pero imagino que también tendrán algunas personas a las que no les guste o que critiquen sus vídeos. ¿Cómo gestionan eso?
–Al principio los gestionaba bastante mal porque haciendo una cosa sin ánimo de lucro, sí que es verdad que ya hacemos los shows y a través de ahí ganamos dinero, que es con el que pagamos la luz y el agua de nuestra casa, pero el resto del tiempo es sin ánimo de lucro. Yo he subido un vídeo y ya está y nadie me paga por hacer eso.
Por lo menos al principio, ahora ya sí que salen marcas y salen cosas, pero al principio subía vídeos por reírme y la gente criticaba y me afectaba un montón porque digo si te lo estoy dando para que te rías, si por mí a lo mejor no tendría ni por qué hacerlo, lo hago para que te rías, si no te quieres reír pues no te rías.
Pero ya un poco te vas acostumbrando con el tiempo y te vas acostumbrando a que hay gente que no le va a hacer gracia o que tiene un día malo y lo paga contigo y al final lo relativizas un poquito y ya está.
"Con el tiempo te acostumbras a que hay gente que no le gusta o que tiene un día malo y lo paga contigo"
–¿Y cómo llevan ser pareja sentimental y profesional?
–Pues mira, lo llevamos medianamente bien y nos vamos compaginando como podemos. Ahora mismo, por ejemplo, no está Isa en la entrevista porque está con la niña y se ha ido a dar una vuelta con ella esperando a que yo hiciera la entrevista y que no estuviera aquí aburrida y dando gritos. Se la lleva al parque y nos vamos compaginando un poco y ya está porque al final es que vivimos juntos, trabajamos juntos, trabajamos de lo mismo que vivimos, nos vamos a trabajar afuera y nos vamos juntos. Al final estamos juntos y como no le eches paciencia y ganas, no vas a ir a ningún lado.
–Lo que estáis viviendo ahora mismo imagino que será como un sueño, pero ¿algún sueño que tengáis pendiente de cumplir?
–A Isa, creo que a Isa le gustaría, creo recordar, que quería salir en una película y a mí más que salir me gustaría o escribirla o ayudar a escribirla.
–Para ir finalizando, como dijo que todavía quedan algunas entradas para el show de por la mañana, ¿quiere mandar un mensaje a la gente de por qué no se puede perder este espectáculo?
–No se lo puede perder, principalmente, porque no sé cuándo nos van a mandar otra vez para allá. Y segundo porque la gente a la que le hemos preguntado, e incluso han preguntado por mí, como mi padre, que nadie lo conoce y él como viene a algunos shows pues se queda en la puerta y como nadie lo conoce pues pregunta ‘¿Y cómo ha estado’ Eso lo hace él por su cuenta y todo el mundo al que le pregunta dice que sale súper contento y súper feliz y que le recuerda muchas cosas de su día a día y se lo pasa muy bien.
Entonces al final qué mejor excusa para venir que pasárselo bien y saber que otra gente se lo ha pasado muy bien incluso sin tener la excusa de que me lo está diciendo a mí por no herirme