¡Sevilla tiene un color especial!

En este año 2011, tan cargado de problemas, el partido Popular es el único partido que tiene clara su decisión: ¡Presentar ser una alternativa política y al tiempo presentar una política alternativa!. ¡Presentar una nueva política de integración territorial y nacional!. Porque el PP, es el único partido que no quiere pisotear la constitución de 1978, es más queremos recuperar sus principios y la ilusión que todos los españoles expusimos en su promulgación. Por eso acusamos al gobierno socialista de ser culpable de tener al país atropellado, sin prestigio y dividido. ¡Culpable de los tremendos efectos que la crisis nos esta produciendo! Mas, no es solo una batalla meramente económica para superar la crisis la que se plantea, es algo más: ¡Es una política alternativa de defensa de la unidad española, enfrentada al absurdo de la división nacionalista!
¡Somos un partido unido!, ha sido una de las claves de la convención celebrada hace pocos días en Sevilla ¡Somos un partido que responde a las expectativas de confianza e intereses de todos los españoles sin distinción! De esta manera el Partido Popular, se reafirmaba la semana pasada. ¡Sabemos lo que queremos y cómo hacerlo! Es decir, somos lo que queremos ser: ¡Un Partido Nacional de todos!. Un partido, que desea recuperar la ilusión y la seguridad que la constitución del 1978 otorgó a todos los españoles por igual. Porque somos un partido convencido de que las autonomías, factores del llamado milagro español, son necesarias bajo los principios de solidaridad, cohesión y unidad nacional. ¡El fundamento de un estado fuerte y seguro en su unidad!. Solo así, ¡Unidos!, seremos capaces de afrontar los retos del incierto futuro.
Por eso, la convención del partido Popular de Sevilla, ha significado un hecho magnifico, para exigir la unidad, la solidaridad y la constitucionalidad de España como nación. Para exigir cohesión, igualdad, calidad e inversión dentro de la necesaria austeridad que se nos ha impuesto. Y precisamente por esto, aunque el gobierno socialista dirija también algunas palabras de esperanza y austeridad, no podemos compararnos con sus mensajes. Porque durante estos últimos años, el gobierno de Zapatero, ha mostrado actividades dirigidas más a la improvisación y división que a la unión y la eficacia. No es por tanto sorprendente de que estemos orgullosos de que nuestros principios tengan una perspectiva abierta de unidad y lealtad a los deberes constitucionales.
Y estamos orgullosos, porque nuestros objetivos responden a los intereses de todos los españoles, aun de los que no coinciden con nuestra forma de hacer las cosas. Y esto es así, porque lo único que se busca en el Partido Popular, es alcanzar todos juntos un futuro mejor. En conclusión, el Partido Popular quiere vertebrar de nuevo España, como un estado democrático de derecho, unido y constitucional. Por ello, el partido Popular se plantea un extraordinario reto: ante la división realizar un viaje de vuelta: vertebrando de nuevo la unión de abajo hacia arriba, es decir, que desde las comunidades autónomas se forje de nuevo el estado de unidad que nuestra constitución nos ofreció en 1978.
Pero, en todo esto ¿Ceuta que puede aportar? Quizás algunos lo ignoren, pero son muchas las aportaciones que podemos hacer al objetivo común de  nuestra nación. Para empezar la cohesión de unos ciudadanos que hombro con hombro trabajamos todos los días por nuestra ciudad y que somos ejemplo de cómo diversas culturas se abren juntas a un mismo destino. Y también, podemos mostrar el ejemplo de un gobierno estable, dirigido por el gobierno del Partido Popular, presidido por Juan Vivas Lara, que desde el principio, asumiendo los principios de cohesión, inversión, calidad e igualdad, nos ha permitido sentarnos en igualdad junto a las grandes comunidades autónomas españolas. También, el ejemplo de la moderación y educación en el trato con todos. Y el ejemplo de un talante acompañado de talento, que busca el progreso e interés de todos, y cada uno de los ceutíes. El ejemplo de cómo una ciudad puede transformase en una década. El ejemplo… en fin, son tantos los ejemplos que hemos dado y que han sido reconocidos en Sevilla, que no se precisa hacer una interminable lista de nuestros aciertos y triunfos.
Por todo lo anterior, no es de extrañar, que en la convención del Partido Popular celebrada en Sevilla, nuestra ciudad haya sido presentada y sentida como ejemplo no ya de una alternativa política sino de la política alternativa que mostramos día a día a toda la nación. Consecuentemente, no nos sorprendieron demasiado las muestras de admiración y cariño que nuestro alcalde recibió en Sevilla y que permitió que en una convención nacional, nuestra ciudad tuviera un tiempo especial dedicado solo a ella. Porque, desde estas líneas podemos afirmar que todo ello, nos confirmó, aún más si cabe, la realidad y certeza de que la política que esta realizando en nuestra ciudad el Partido Popular con nuestro presidente, Juan Vivas Lara, es la correcta, ya que… salvando las dimensiones de la territorialidad, es casi la misma que la que en dicha convención nacional se acordó para toda la nación. Por ello, sintiéndonos orgullosos de nuestra ciudad, y porque en estos días lo hemos sentido, sin duda: ¡Sevilla tiene un color especial!