¿Quién conoce el reglamento?

El Polígono, la Cuesta Parisiana o Enrique el Navegante son algunos de los puntos en donde la Ciudad ha dado orden de que se pinten unos peculiares pasos de cebra que tienen un error: no están incluidos en el manual de señales reglamentarias.

¿Esto qué significa? De entrada que si a usted le multa la Policía Local por no respetar esa señal tiene las de ganar sin necesidad de efectuar recurso alguno. La necesidad de atender las demandas de la Plataforma Motera, crítica por la cantidad de accidentes provocados por lo resbaladizo del pavimento en donde estaban las anteriores marcas viales, ha llevado a la institución municipal a buscar este parche sin reparar en que la sustitución de los tradicionales ‘cebras’ por otros pasos antirreglamentarios está dejando hueco a la ilegalidad.
“Se ha mirado más por atender las quejas de un colectivo que por la seguridad vial, que es lo que debe interesar a todos”, apunta un miembro de la Policía Local, Cuerpo que ya ha trasladado su malestar a Tráfico. La Jefatura también reconoce este hecho y advierte de que un expediente o una denuncia tramitada contra un conductor por no respetar este tipo de señal quedaría invalidada al no estar reconocida en el manual de señales reglamentarias.
Otro sector molesto con esta situación es el de las autoescuelas. ¿Qué deben indicar a un alumno, que haga el paso de peatones o no? La respuesta es que no, salvo que el peatón esté ya cruzando -no asomándose para cruzar- ante lo que hay que frenar para evitar un atropello.
Las quejas van más allá de estos nuevos pasos. Los que se están pintando de otros colores que no sean el blanco alternado con el negro son también antirreglamentarios. Es el caso de los pintados de rojo sobre badenes -como los bajos de la Marina- o los ubicados confundiéndose con las losas, como es el caso del Paseo del Revellín a la altura de Telefónica.
De momento la Ciudad no ha dado marcha atrás, pero curiosamente en otros puntos de la península en los que se está cometiendo el mismo error es el propio PP el que ha llevado la voz cantante en la crítica por este tipo de señales. Es el caso de Jaén, en donde el Grupo Popular ha acusado al Gobierno de tomarse “a cachondeo” la ciudad al incumplir el Reglamento General de Circulación para la aplicación y desarrollo de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial y que fue modificado por Real Decreto 965/2006, de 1 de Septiembre.
La crítica se ha hecho por pintar pasos como los que ya hay en Ceuta, ya que darían prioridad de paso a ciclistas no a peatones. En este caso la responsabilidad ha sido del PSOE y la crítica ha venido del PP. En Madrid se esta extendiendo la moda de pintar todos los pasos de peatones cambiando las rayas de cebra de toda la vida por dos filas de cuadrados a ambos lados. Es la moda de la antiseguridad.

En datos

Otros ejemplos
En ciudades como Jerez, Jaén o Madrid se está poniendo de moda este  tipo de pasos. La Policía advierte de que esto puede provocar un problema en el caso de que se produjera algún accidente ya que el peatón, sin saberlo, estaría legalmente indefenso. En la capital de España hay casos de pasos en donde se han dejado las lineas longitudinales que separan ambos sentidos de la calzada en medio del paso, dibujando después unos monigotes en el suelo. Fuera aparecen pasos a rayas rojas y blancas, verdes y blancas, azules y blancas, verdes y azules. Todos son antirreglamentarios y no significan legalmente nada.
La confusión
Aunque siempre que un vehículo topa con un conductor debe parar, en este caso existiría la confusión de, si se produce un accidente, comprobar legalmente quién tiene la culpa. Si existe una señal semafórica o una señal vertical se puede hacer predominar esta orden. En el caso de los pasos que hay en Ceuta no hay aclaración al respecto.
Las multas
Quedarían sin efecto ya que ante señales que no están en el reglamento el conductor no está obligado a cumplir una norma que no existe. Hay ya jurisprudencia que avalaría cualquier recurso que cabría interponer.