A primera hora de la mañana de ayer agentes de la Policía Nacional rodeaban la plaza de los Reyes en donde habían pasado la noche varios de los inmigrantes subsaharianos que llevan dos semanas de protestas pidiendo libertad. Era el momento elegido para aplicar la resolución del delegado del Gobierno, José Fernández Chacón, que permite al Cuerpo policial proceder al desalojo de los inmigrantes si se entiende que se ha vulnerado la normativa en materia de orden público y ha existido una desobediencia.
Con cánticos de ‘¡Oh África, oh liberté!’, los inmigrantes se dejaban detener, uno a uno, por los policías sin oponer resistencia y sin parar de cantar. Algunos lloraban, otros miraban al cielo pero todos ellos eran protagonistas de una situación contemplada por decenas de ceutíes que se agolpaban, tras el cordón policial dispuesto por la Policía Local, para ver la operación. Según la Policía, ahora se procederá a la entrega de los cerca de 40 detenidos al juzgado, y será la institución judicial la que decida el siguiente paso que se dará, si quedan en libertad con sanción o si deben ser trasladados a un centro de la península, al igual que lo fueron los 14 compatriotas detenidos el pasado lunes y que se encuentran en un CIE. Éstos, tras pasar allí 62 días, deben quedar en libertad si no ha fructificado acuerdo alguno de deportación con su país de origen, algo que la propia Policía considera poco probable dado el estado de las relaciones diplomáticas con Camerún. A fecha de hoy se encuentran internados en un centro.
Algunos de los inmigrantes llevaban más de un año en el campamento, mientras otros llevaban sólo meses. Todos se han unido a la hora de liderar unas protestas que ayer obtuvieron la primera respuesta contundente de la administración central. Algunos de los testigos criticaban la detención de los inmigrantes puesto que llevaban más de un año, e incluso dos, en la ciudad y sus expedientes debían haberse resuelto por otra vía. Mientras se desarrollaba la operación, sin incidentes, otros dos subsaharianos eran rescatados por la Salvamar ‘Gadir’, tras ser detectados en una balsa neumática. Al puerto se desplazaban unidades de Cruz Roja, encargadas de prestar los primeros auxilios a los rescatados que, al encontrarse en buen estado de salud, no requirieron de traslado alguno a centro sanitario.