Agentes de la
Guardia Civil sorprendieron en la mañana de ayer a dos marroquíes justo después de que consiguieran saltar al cuartel que tiene el Instituto Armado en la barriada de Hadú. Los dos jóvenes, con tarjeta de residencia legal en Ceuta, iban acompañados de un tercero, al parecer menor, que no saltó al edificio de la Comandancia.
Los hechos se produjeron poco antes de las 8:00 horas cuando dos de los tres individuos accedieron a la Casa Cuartel por la zona que da al campo de fútbol Alfonso Murube. De inmediato los agentes encargados de controlar las cámaras perimetrales detectaron a los intrusos, mientras un tercero escapaba. Se descarta que hicieran tal gesto para intentar robar, manifestando ambos que escapaban de una pelea que se había producido previamente y que ante el temor de ser perseguidos habían saltado a las dependencias oficiales. Tal y como han explicado fuentes consultadas por este periódico, ni sabían que donde se habían ‘colado’ era la Comandancia del Instituto Armado.
Algo accidental
Tras comprobarse que era todo una cuestión más vinculada a la pura accidentalidad que a un asunto de mayor calado, no se procedió a su detención. Según corroboran las mismas fuentes a El Faro de Ceuta, la detección de los intrusos se produjo al momento al apreciarse por el sistema de vigilancia y control que tienen las instalaciones esta anómala entrada.