La medida acordada por la Oficina de Extranjería y el SPEE permanece vigente mientras que existan ceutíes en la Oficina de Empleo con esta cualificación profesional acreditada. La Sociedad Pública de Empleo Estatal, S.P.E.E., y la Oficina de Extranjería han acordado que la expedición de permisos de trabajo a transfronterizas como asistentas del hogar quede paralizada mientras existan doce ceutíes en la Oficina de Empleo que puedan acreditar su cualificación profesional y estén especializadas en dicho perfil. Carlos Torrado, director provincial de este organismo, propuso la iniciativa al responsable de Extranjería en una reunión convocada por José Fernández Chacón, delegado del Gobierno, a propósito de la problemática en torno a la figura del transfronterizo. No obstante, el órgano que dirige Alfonso Grande continúa con la renovación de autorizaciones de trabajo para extranjeras que trabajan en hogares ceutíes.
Esta medida coincide con la clausura del curso de formación ocupacional para empleadas del hogar, en el cual han participado doce ciudadanas ceutíes, cualificadas para desarrollar esta función y cuyo perfil se ha profesionalizado. Isan Bujiar, coordinadora del curso impartido en Academia San José, indicó que cada módulo incluye contenido teórico y práctico sobre técnicas de limpieza del hogar; la preparación y elaboración de menús; la atención y cuidado de menores y personas mayores; el cuidado de plantas y animales domésticos; el mantenimiento de relaciones humanas; la resolución de imprevistos y primeros auxilios; y el aprendizaje de técnicas de organización, un total de 500 horas a las que se suman las 30 correspondientes sobre la prevención de riesgos en el puesto de trabajo y las 15 de inserción laboral y técnicas para la búsqueda de empleo. Los datos de estas doce personas ya han sido trasvasados a la Oficina de Empleo y figurarán en la misma desde el lunes.
Sin embargo, aclaró el director provincial del S.P.E.E., el régimen del hogar es de carácter especial ya que una persona conviene con otra la contratación al estar contemplada en el mercado local, es decir, una persona puede solicitar el servicio de una empleada del hogar dándole de alta porque es nacional. Por el contrario, la concesión del permiso de trabajo a extranjeros se realizará una vez extinguido el archivo de ceutíes en la Oficina de Empleo, es decir, en el régimen general de transfronterizos. Precisamente, para asegurar la disponibilidad de esta categoría profesional entre la demanda de empleo y la continuidad de esta modalidad de formación ocupacional, el S.P.E.E. contempla dos cursos de empleada del hogar en su programación para 2010.
Academia San JoséMalika Abdelkrim, directora de la Academia San José, explicó que solicitó este curso en 2009 ya que en la ciudad “hay muchas mujeres preparadas que pueden perfeccionar sus conocimientos para buscar trabajo en este sector”. De hecho, las primeras doce alumnas de esta experiencia del S.P.E.E. en Ceuta dispondrán de cien horas de práctica en hoteles o pensiones. “Estamos muy contentas con los que hemos aprendido, estamos preparadas para organizar una mesa siguiendo el protocolo o cómo tratar los tejidos”, comenta Nadia Mufedal, una de las alumnas. La promoción agradeció el esfuerzo de la Academia San José, la gobernanta Josefina Pérez, la profesora Cristina Corral y el resto del equipo docente.
El perfil de la solicitante de empleo en el servicio ceutí es mujer, menor de 25 años, de baja cualificación profesional y académica en una proporción que duplica la demanda estimada en la península, describió Torrado, de modo que esta formación supone una alternativa para desaparecer de ese archivo, añadió. Por otra parte, la relación entre inscritos masculinos y femeninos es de 60 y 40 por ciento respectivamente, otro de los factores que convierte la atención del hogar en un filón para generar empleo.
Fernández Chacón, delegado del Gobierno, reunió a la Oficina de Extranjería, la Inspección de Trabajo y al S.P.E.E. para abordar esta cuestión. El representante de la Administración General del Estado solicitó a Torrado que mantuviera un encuentro con los sindicatos para conocer sus inquietudes y, en el marco de sus competencias, plantear recomendaciones para paliar la situación.
En aquel encuentro, el director provincial se comprometió a hacer todo aquello dentro de sus posibilidades. En concreto, recordó Torrado, además de la urgencia de las centrales por generar empleo, entre sus preocupaciones figura la presencia masiva de transfronterizos en el sector de la construcción y en el ámbito de las empleadas del hogar.