Tremendo enfado el del padre de una niña de cinco años de Ceuta que se rompió el brazo jugando y tuvo que permanecer ingresada en el
Hospital Universitario toda la noche, "porque el traumatólogo de guardia no quiso ir". Lullaim Abdeselam, joven vecina del barrio de
Hadú, se divertía en una instalación con piscina de bolas cuando sufrió una caída y se fracturó el húmero.
Ocurrió este domingo, alrededor de las 20.30 horas, según explica su padre, Reduan Abdeselam. Él fue el encargado de trasladarla al hospital, donde fueron atendidos en primera instancia por un médico del servicio de
Urgencias. "La verdad que se portó estupendamente. Fue muy atento e incluso la acompañó a la radiografía, algo que no es tan frecuente y se agradece", expone. El problema llegó una vez realizadas las pruebas, que revelaban la rotura del hueso en las proximidades del hombro. En ese momento, según relata Abdeselam padre, "llamaron hasta en seis ocasiones" al traumatólogo de guardia. Sin embargo, este no habría querido desplazarse al lugar, según detalla el progenitor en una queja elevada al
Ingesa. "En ese momento la niña, que solo tiene cinco años, rabiaba de dolor y él se negó a venir a examinarla. Les ordenó que la ingresaran, poniéndole una férula y haciéndole la radiografía".
Como supuesto motivo esgrimido por el especialista para no acudir al centro hospitalaria, Abdeselam cita "la
huelga médica". En ese contexto, la joven permaneció ingresada toda la noche en el Hospital Universitario y fue intervenida en la mañana de este lunes. Su padre llegó a presentarse en dependencias policiales con la intención de interponer una denuncia sin que esto diera resultado, explicándole que lo acaecido se ajustaba más a una queja a nivel sanitario. Con la reclamación debidamente interpuesta, espera ahora que su hija, que de momento permanece en el centro sanitario, pueda recuperarse pronto y se exija responsabilidades a los que entiende responsables de una situación "inaceptable".