Ingresa en prisión

Agentes de la Policía Nacional han echado el cierre, con el beneplácito inicial de la clase judicial, a la quema premeditada de varios vehículos en el interior del garaje del edificio Galea. Siniestro que tuvo una importante repercusión mediática debido a que fue obligado el desalojo de todos los vecinos del bloque, en plena madrugada de diciembre.
El responsable de todo aquel desaguisado fue un marroquí de 19 años llamado A.L., quien ha confesado parcialmente su delictiva actuación. Su detención se  produjo de una forma casual, cuando se le sorprendió robando en el interior del restaurante del Club Náutico CAS. Una vez en las dependencias policiales y ante la cantidad de pruebas que habían ido acumulando en torno a este incendio y a otro de un vehículo que estaba estacionado en la calle Nicaragua, el detenido confesó su participación. Son pruebas de peso que han motivado la imputación judicial que ha derivado en su posterior ingreso en la prisión de Los Rosales, abriéndose tres procedimientos judiciales en su contra. Uno por el robo con fuerza que llevó a la Policía a trasladar al juzgado pruebas contundentes para abrirse otros dos procedimientos por delitos de daño por incendio, en relación con el siniestro de Galea y la quema del vehículo estacionado en calle Nicaragua.

Autor confeso

Según mantiene la Jefatura Superior, el detenido se introdujo la madrugada del 7 de diciembre en el garaje de Galea con la pretensión de robar en los coches que había en su interior. Luego les prendería fuego para evitar el reconocimiento de las huellas. Lo que hizo fue provocar un auténtico caos, ya que las llamas ocasionaron gran cantidad de humo y los Bomberos y la Policía Local tuvieron que ordenar en plena madrugada el desalojo de todos los vecinos. Personas mayores, bebés, minusválidos... aquella noche la temeridad provocada por el detenido les causó un enorme perjuicio a todos ellos. Los Bomberos comprobaron que habían quedado calcinados un vehículo Honda, una moto y una bicicleta, viéndose además afectados otros vehículos por las cenizas y el humo. Los coches tenían signos de haber sido violentados para robar en su interior, eso fue lo que hizo concluir a los agentes que se estaba ante un ladrón y no ante el perfil del autor de un ajuste de cuentas como en otros casos en los que se han visto afectados vehículos de agentes policiales.
Detenido A.L. se ha podido comprobar que es la misma persona, por pruebas recogidas in situ, que provocó este incendio y quien, además, dos meses antes, quemaría un Mitsubishi Montero que estaba aparcado en la calle Nicaragua al parecer por pura venganza.
Durante el periodo en que ha estado detenido el joven ha terminado confesando la autoría del robo así como de estos incendios. Aseguró  que su idea era la de no dejar rastros, salvo en el que caso de la quema en calle Nicaragua en la que actuó por un ajuste de cuentas.

Un arresto que sí termina con el ingreso en la prisión ceutí

Las luces y sombras han rodeado las relaciones policiaco-judiciales. Los primeros detienen a presuntos autores de quemas de vehículos que luego pueden quedar en libertad sin lograr las imputaciones de los segundos. En estas últimas semanas se han conocido muchos casos de desencuentros en los que la ausencia de una investigación de peso capaz de enervar la presunción de inocencia del detenido y mover a un juez a dictar una sentencia condenatoria ha sido la tónica. El caso más mediático fue el relacionado con la detención del presunto autor de la quema de coches ocurrida en La Libertad. Tras ser puesto a disposición judicial quedaba libre y sin poder ser imputado por estos delitos, quedando únicamente vinculado al robo de piezas. Una información que coincidía en el tiempo con la publicación de un par de sentencias. Los acusados de cometer delitos de daño de incendio en vehículos quedaban absueltos ante la falta de pruebas contundentes para mover al magistrado de turno a ordenar su ingreso en la penitenciaría ceutí. El caso publicado hoy rompe esta tónica ya que sí se ha conseguido, gracias también a la confesión del detenido, que quede imputado y que además se aporte claridad a una de las acciones delictivas que mayor alarma social generó entre la ciudadanía por el añadido del desalojo de las familias.

Siguen activas más investigaciones sobre otros casos

La Policía Nacional mantiene abiertas más investigaciones en torno a las múltiples quemas de vehículos que se llevan produciendo en la ciudad desde el año 2009. Más de 600 vehículos han sido quemados de manera premeditada, barajándose múltiples causas lo que ha dado lugar a la puesta en marcha de distintas investigaciones. Al margen de los ajustes de cuentas, de los intentos de fraudes y de las venganzas entre grupos dispares, se trabaja sobre otras líneas de investigación para, sobre todo, hacer daño al entramado que puede soportar parte de este delito que se convierte en negocio. Esas investigaciones paralelas también las tiene en curso la Guardia Civil contando además con colaboraciones valiosas de la Policía Local que han sido claves en algunas de las detenciones ya materializadas previamente.