Un vehículo y 5 bomberos salían del Parque de Ceuta sobre las dos y veinte de la madrugada para responder al aviso de un incendio de matorrales en la zona del Recinto, concretamente en la subida, en la zona del acantilado.
Fueron necesarios tres cuartos de hora y 2500 litros de agua para sofocar las llamas, que aunque no afectaron a viviendas ni personas, arrasó una amplia zona, que en una primera estimación podría rondar los mil metros cuadrados. Se desconoce por el momento si el incendio ha sido provocado o fortuito.
Los vecinos ya han denunciado en alguna ocasión el mal estado de la zona en lo que se refiere a limpieza, por la acumulación de basura y por asentamientos ilegales de personas.
Anteriores intervenciones
Unos metros más abajo, hace hoy seis días, fue quemada en torno a las ocho de la mañana la pasarela de madera situada entre la playa de Fuente Caballos y la de La Ribera. No era la primera vez que esta estructura de madera sufre daños ocasionados por las llamas. En ocasiones, desconocidos encienden hogueras en la parte inferior del puente que, al descontrolarse, acaban quemando las tablas del suelo.
Semanas anteriores, también en zona cercana, concretamente junto al polideportivo Guillermo Molina se quemaron y vandalizaron varios vehículos, de hecho, uno de ellos fue quemado en hasta en dos ocasiones en jornadas diferentes, y no de noche, sino cuando ya había amanecido, a plena luz del día. En estos casos, se vieron afectados los coches estacionados junto al turismo que, al parecer, era el objetivo de los vándalos que además de provocar las llamas, insertaron desde la parte trasera hasta la delantera del vehículo una barra metálica procedente del mobiliario urbano cercano.
Los bomberos ya han repetido en innumerables ocasiones sus quejas por la situación, ya que les preocupa que se produzca un incendio fortuito o de gravedad al que puedan acudir tarde o no puedan acudir por estar atendiendo incendios provocados.