Una columna de humo ha alertado a los excursionistas que este martes disfrutan de
la Mochila en los campos de Ceuta. Aunque algunos han pensado que el fuego podría haberse originado en los montes de la ciudad autónoma, desde
Benzú se ha podido comprobar que el
incendio se produce en Beliones,
Marruecos. Las llamas incluso son visibles, al menos, desde este punto fronterizo y, aunque la perspectiva puede resultar engañosa, el fuego parece próximo a una torre de vigilancia del
perímetro fronterizo marroquí. Varias lenguas se alzan sobre los montes de la vecina localidad marroquí, donde el foco, en un primer momento controlado según las informaciones oficiosas, se ha vuelto a reavivar.
El cálculo de la superficie quemada hasta el momento resulta impredecible y se espera que las labores de extinción de los bomberos marroquíes así como la intervención de otros cuerpos encargados de la seguridad en el país vecino consigan anular la amenaza que ha generado a unos kilómetros de territorio ceutí. Aún permanece reciente en el recuerdo
la oleada de incendios que azotaron Chaouen el verano pasado, con varios cientos de hectáreas calcinadas y en el que incluso miembros de Protección Civil perdieron la vida. Ante este nuevo desafío, se espera que la virulencia del foco no vaya a más y pueda sofocarse sin contratiempos.
Los ceutíes, inmersos en la celebración de la Mochila, no tienen la misma perspectiva que los vecinos y visitantes que este martes a mediodía se encuentran en la barriada de Benzú y disponen de una panorámica más amplia de la Mujer Muerta y parte de los montes de Beliones. Aunque el vecindario ha sido el primero en percatarse de la intensa humareda en territorio marroquí, sigue con inquietud los acontecimientos en torno a este incendio forestal y las posibles causas que lo han originado.