La vida de Juan Carlos Sánchez Catarecha cambió para siempre en febrero de 2022. Era una persona muy activa, a la que le gustaba dar sus paseos por Ceuta, pero terminó en una silla de ruedas debido a un ictus.
Esta situación trastocó toda su vida, pero él no quiso que fuera un incordio para su familia. Acostumbrado a ser una persona independiente, Juan Carlos no quería necesitar la ayuda, por ejemplo, de su hijo para salir a la calle.
Esto le llevó a hacerse con una silla eléctrica, con la que poder desenvolverse y no necesitar ayuda. Una compra que no imaginaba que le haría perder la prestación por parte del Imserso de 300 euros. “Me quitan la ayuda porque ahora dicen que al tener esta silla me familiarizo con el entorno”, explica en declaraciones a El Faro.
Esa pérdida le ha partido todos sus planes, ya que la utilizaba en parte para pagar a una persona que le ayuda en su casa. “Yo le pago 600 euros y 300 de esos salían de la ayuda del Imserso. Me apoyaba con cosas de la casa, porque, aunque quiera ser independiente la mano izquierda no la puedo mover, solo puedo hacer cosas con la derecha”.
Juan Carlos recuerda que unos técnicos del Imserso visitaron su domicilio para evaluar su situación, pero no esperaba las noticias tan negativas que llegarían después. “Desde octubre llevo sin cobrar esta ayuda, un dinero que, aunque no fuera una locura, al menos me ayudaba para pagar a la persona que viene a mi casa. No quiero ser un incordio para mi familia, solo quiero seguir valiéndome por mí mismo”.
A sus 66 años, Juan Carlos pide al Imserso que valore su situación y aclara que no por tener este tipo de silla su vida es la de antes. “El ictus que me dejó sin movilidad no se va por tener una silla electrónica”.
A los responsables del Imserso parece que cada vez les importe menos todo.
Es una tremenda injusticia que por llevar una silla eléctrica le quiten la prestación de 300 euros mensuales que estaba cobrando.
Da la impresión que cada día las administraciones son menos humanas.
Por otro lado hay personas que llevan un año y medio esperando que le reconozcan un grado de discapacidad, ¿esto es el estado del bienestar del que tanto se le llena la boca a los políticos hablando? Menuda tela marinera que tienen.
"Estado de bienestar", para eso no machacan a impuestos y cuando hacen falta si te he visto no me acuerdo