La institución que peor valoran los niños y adolescentes migrantes solos en situación de calle en Ceuta es la Guardia Civil, por detrás del Centro de Protección, según las conclusiones del estudio ‘Percepción de legitimidad institucional y composición del constructo en una muestra de menores extranjeros en situación de calle’ que acaba de publicar la investigadora predoctoral de la Universidad de Málaga Elena Casado.
En cambio, la Policía Local y la Policía Nacional están mejor valoradas y tienen mejor percepción de legitimidad, ya que “consideran que ambas instituciones policiales los escuchan y los tratan con respeto”, algo que “podría derivar en una mayor conformidad y cooperación con estas dos instituciones”.
“La mala percepción de legitimidad hacia la Guardia Civil”, interpreta la autora, “podría estar explicada, entre otros motivos, porque esta institución es la encargada de custodiar el área restringida del puerto de Ceuta y es la zona en la que los menores entran sin autorización para intentar ‘hacer riski’, aunque eso no justifica el trato desigual y sin respeto que los menores perciben de la institución”.
“La registrada hacia el centro de protección podría estar condicionada”, añade, “por la situación de hacinamiento que sufre y que dificulta que los trabajadores dediquen tiempo y cuidados a cada menor, e incluso por el desconocimiento que muchos de ellos tienen del mismo, del cual sólo saben lo que otros menores comentan de él”.
Casado advierte que esa “mala percepción” hacia determinadas instituciones “tiene varias consecuencias negativas tanto para los menores, en la medida en que se exponen a situaciones de riesgo por permanecer en calle y se podría cronificar esta situación, como para las dos instituciones mencionadas ya que la percepción de legitimidad condiciona la conformidad posterior con las normas y decisiones de estas”.
“La mala percepción de los menores extranjeros no acompañados en situación de calle hacia la Guardia Civil y el centro de protección”, resume, “podría debilitar, de acuerdo con la literatura previa, la conformidad y el cumplimiento de las normas y decisiones de estas instituciones”.
En cualquier caso, los menores coinciden en que ninguna de las cuatro “los trata con igualdad, ni les da explicaciones de sus actuaciones”. Es decir, los menores sienten que sus interlocutores “actúan movidos por sus prejuicios personales y no con la objetividad necesaria para ser consideradas neutrales”.
El objetivo principal que se marcó Casado con su trabajo, innovador a nivel nacional, fue “analizar la legitimidad institucional otorgada por los menores extranjeros no acompañados en situación de calle en Ceuta a la policía y al centro de protección de la ciudad a través de los elementos que integran la teoría de la justicia procedimental”.
Además, quiso “explorar cómo se agrupan en factores los elementos que forman la legitimidad y comparar esa agrupación con la que la literatura académica ha realizado previamente”.
Su análisis concluye que, en todas las instituciones menos en la Policía Local, las variables se agrupan en dos factores: calidad de trato (compuesto por respeto y participación) u calidad de decisión (neutralidad y confiabilidad).
“La función policial puede ser más de control de las conductas de estos menores, pero el centro de protección tiene una función de protección”, explica la investigadora en sus conclusiones.
La mayoría de los menores tiene una opinión muy mala (64,6%) de esta institución. Además, no cree que los traten igual que a los niños o adultos españoles (76,5% y 64,9%) ni con respeto (70,7%). No les dan explicaciones de sus actuaciones (63,3%) ni, tampoco, se sienten escuchados por ellos (61,5%).
Con respeto al centro de protección, los entrevistados tienen una muy mala (54,7%) opinión de él. Al igual que sucede con la Guardia Civil, la mayor parte de los niños de la calle se mostraban nada de acuerdo con que le trate de manera neutral y con respeto. Igualmente no consideran que se les den explicaciones de sus actuaciones ni se sentían escuchados.
La mayoría de los menores tienen una muy buena (32,3%) o buena percepción (32,3%) de la Policía Local. Sin embargo, se encuentran nada de acuerdo (61,6% y 53,7%, respectivamente) con que el Cuerpo de Seguridad de la Ciudad Autónoma los trate igual que a los menores y que a los adultos españoles. Tampoco consideran que esta institución les dé explicaciones de sus actuaciones (59,4%). Sin embargo, sí se muestran totalmente (27,3%) o bastante de acuerdo (27,3%) con que los trata con respeto. Igualmente, se sienten escuchados por los agentes (totalmente de acuerdo 17,8% y bastante 24,7%). Con referencia a la Nacional, la mayoría tiene muy buena (30,9%) o buena (23,7%) opinión, pero con la Local no están nada de acuerdo con que los trata igual que a los menores (54,5%) y que a los adultos españoles (58,9%).
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