Los tres individuos fueron identificados en la zona de los Rosales y hubo persecución
“A mi hijo le han dado una paliza por quitarle nada más que una barra de pan y unos euros”. Quien habla así es Nora, la madre de Yusef, de 10 años, que sufrió una paliza brutal por parte de tres supuestos menores marroquíes en la zona de las 317 viviendas.
Alrededor de las tres de la tarde del sábado, Nora mandó a Yusef a comprar dos barras de pan a una tienda que ha abierto recientemente en el interior de este grupo de viviendas. Cuando ya regresaba, estos tres jóvenes le llamaron para que se acercara y le dijeron que tenía que darles pan, a lo se negó el pequeño.
Está previsto que esta mañana se celebre el juicio por esta agresión al pequeño Yusef
Entonces se fueron para él y le pidieron el dinero, seguramente no más de cuatro euros, porque su madre le había dado un billete de cinco. De muy malos modos se lo arrancaron, aunque Yusef intentó resistirse pero cayó al suelo, tras sufrir un arañazo en la cara. Aprovechando que se encontraba tirado comenzaron a darle patadas y codazos en todo el cuerpo, pero, de manera principal en el abdomen, saliendo corriendo de manera inmediata.
Madre
La madre se encontraba preocupada porque estaba tardando más de la cuenta y entonces le dijo a su otro hijo que se asomara al balcón para ver si regresaba. El hermano le vio regresar cojeando y magullado, por lo que rápidamente dio la voz de alarma tanto a su padre como a su madre. Cuando el pequeño llegó al hogar contó lo que había pasado y decidieron, de manera inmediata, acudir a poner la correspondiente denuncia al acuartelamiento de la Policía Local.
Varias patrullas comenzaron a rastrear la zona, mientras que también en el vehículo de la familia, el padre, la madre y Yusef recorrían la zona de San José, Los Rosales y Juan Carlos I. Entonces, en un momento determinado, les vio y se lo comentó a sus progenitores, que lo pusieron en aviso de los agentes de la Policía Local.
La madre está convencida de que son mayores de edad, pero que lo ocultan
Estaban en las proximidades de la antigua prisión y el padre, viendo lo que le habían hecho a su hijo, salió corriendo detrás de ellos, al igual que los policías locales. Los tres agresores se lanzaron como pudieron por las largas escaleras que dan a la zona donde se está construyendo ahora el Mercadona.
Un ciudadano que pasaba con su vehículo por allí y viendo lo que pasaba dio un frenazo delante de uno de ellos, el cual resultó ser el principal agresor, que cayó al suelo, pudiendo ser detenido ya por los agentes de la Policía Local. Sus otros dos compinches cayeron unos minutos más tarde y los tres fueron conducidos a la Jefatura Superior de Policía, donde permanecen hasta que hoy se celebre el juicio rápido.
Dolores
Mientras tanto, a Yusef le persistían los dolores en toda la zona abdominal por lo que los padres decidieron llevarle hasta el servicio de urgencias del Hospital Universitario. Cuenta la madre que está segura de que son mayores de edad, “porque da la casualidad de que el trío afirma que son nacidos en el año 2000, con lo cual tendrían ahora mismo unos 17 años y se les consideraría menores, con lo que el tratamiento penal sería distinto. No quiero que salgan a la calle, que paguen lo que le han han a mi pequeño”.
Casi 24 horas ingresado en observación
La madre quiere agradecer la gran labor realizada por los agentes de la Policía Local
El pequeño Yusef ha permanecido casi 24 horas en observación en el servicio de Urgencias del Hospital Universitario. Ingresó con fuertes dolores en toda la zona del abdomen y los médicos le estabilizaron, según ha narrado su madre a este periódico. Sin embargo, el problema estaba en que a última hora de la noche estuvieron valorando la posibilidad de darle el alta, pero como le persistían los dolores decidieron esperar hasta primera hora de la mañana.
Le tuvieron que realizar en la mañana de ayer una ecografía para descartar las lesiones internas
Las cosas no iban bien, porque cuando los facultativos estuvieron hablando con la madre y el niño alrededor de las nueve, éste seguía quejándose, con lo cual, los médicos para descartar cualquier posible lesión interna como consecuencia de los fuertes golpes que recibió decidieron realizarle una ecografía, que al final fue positivo en el sentido de que no había ningún desgarro ni lesión interna.
A su casa
Lo enviaron a su casa para que guarde reposo durante unos días, antes de reintegrarse a sus labores en el colegio. La madre cuenta que pasó la noche tranquilo, pero con fuertes dolores, permaneciendo junto a él en observación.
Quiero aprovechar la oportunidad para agradecer la labor realizada por los policías locales, quienes lograron detener a los agresores de su hijo y luego, incluso, se acercaron hasta observación del Hospital Universitario para interesarse por su estado de salud.