Halloween viene celebrándose desde hace unos años atrás con diferentes actividades de la mano de unas animadoras de lo más terroríficas, quienes realizan juegos para divertir a grandes y pequeños. Además, se realizaron diferentes sorteos en los que se han regalado juguetes promocionales de McDonald’s y cartas de Monopoly, entre otros. Aunque el mayor premio ha sido el sorteo de un cumpleaños para 10 niños en el restaurante McDonald’s de Ceuta.
Todos los niños que han asistido durante la tarde del miércoles 30 de octubre a esta fiesta y que han ido disfrazados, se han llevado también una bolsa de chucherías dando así pie a una tradición de esta festividad como es el ‘truco o trato’.
Pero este año ha habido una novedad: un pasaje del terror. Éste, al igual que toda la decoración del restaurante, ha sido cuidadosamente adaptado para que aquellos con corazón sensible no puedan adentrarse en él. Y es que un aterrador payaso esperaba ansioso por atrapar a todo aquel valiente que intentase cruzar este pasaje del terror.
La fiesta de Halloween, hoy conocida por ser una celebración con disfraces y dulces en la que se hace referencia a todo lo relacionado con el miedo pero con un toque infantil y divertido. Pero sus orígenes no tienen nada que ver con lo que vemos hoy día: esta fiesta de origen pagano cuenta con una historia de más de 3000 años tiene raíces celtas. En ella se celebraba el fin del verano ya que era cuando la temporada de cosechas tocaba a su fin y daba comienzo el “año nuevo celta”, que coincidía con el solsticio de otoño. Se creía que durante esa noche el mundo de los muertos se unía con el de los vivos, pudiendo entrar en este último tanto buenos como malos por lo que usaban máscaras para ahuyentar a esos espíritus malos que venían a atormentar a los vivos.
Claro que esta creencia ha ido disipándose con el paso del tiempo, evolucionando hasta llegar a lo que se conoce como la noche de brujas. Una noche en la que disfrazarnos y pasarlo bien disfrutando de lo una fiesta de lo más particular y “terrorífica”.