Han salvado sus vidas de milagro, pero el temor sigue presente porque en el último mes han recibido dos amenazas de muerte a la que se sumó, en la noche del jueves, la más grave, la que se saldó con un reguero de disparos contra su vivienda ubicada en el Príncipe, en Ceuta.
Una mujer y sus dos hijos de 8 y 11 años, residentes en la vivienda de la calle Fuerte que fue atacada a disparos, piden protección ya que “temen por sus vidas”. Ahora más aún después de que, de los al menos 5 disparos efectuados contra su casa, uno entrara en el hogar y “a punto” estuviera “de darle en la cabeza a uno de los niños”, explican sus familiares a El Faro de Ceuta.
“Ella se tiró al suelo y protegió a los niños”, apuntan. Las balas destrozaron cristales de la casa, los impactos se apreciaban ayer a plena luz del día en diferentes puntos de este hogar.
A finales del mes de agosto se produjeron amenazas en la red social de Instagram, en las que se dejaba claro las intenciones atentatorias contra la vida de esta unidad familiar. Fueron amenazas efectuadas a modo de advertencia y con claridad, que fueron trasladadas a la Policía Nacional en forma de denuncia.
“Lo vais a pagar muy bien”, les amenazaron, después llegaron los disparos
“Lo vais a pagar muy bien”, se le amenazó en Instagram. “Acuérdate para que no te sorprenda lo que va a pasar”.
A finales de septiembre y principios de este mes, tocaron el timbre de su casa y después efectuaron al menos 6 disparos al aire, impactando uno de ellos en una farola. Los implicados tocaron en varias ocasiones el timbre para luego sembrar el pánico a tiros. También fueron denunciados los hechos en la Jefatura Superior.
Así hasta la pasada noche cuando dispararon directamente contra la casa. “Ha sido ya para matar”, porque estaban “ella y los niños pequeños” en la vivienda. La afectada, que ha denunciado cada uno de los episodios vividos, reclama protección para ella y sus hijos.
Los autores amenazaron a una mujer al huir
La Policía abrió una investigación para aclarar lo ocurrido, después de que en la misma noche del ataque los implicados escaparan del lugar y procedieran a amenazar a una mujer con la que se toparon en el camino, ya a la altura del conocido local de bodas.
De momento los hechos están denunciados, tanto los de la pasada noche como los anteriores y se trabaja en dar con quienes, es más que evidente, están detrás de todos ellos existiendo un denominador común. En esa tesis trabajan las fuerzas de seguridad, mientras que las víctimas reclaman protección para que no les vuelva a suceder un hecho de estas características.
Piden protección aún sabiendo quienes son,que los denuncien y no se metan en movidas raras con gente rara.
Los vecinos del príncipe callados, como siempre. Dicen muchos que es por miedo, mientras cada dos por tres matan a alguien allí, hasta que maten a uno de los suyos... y entonces se arrepentirán de no haber hecho nada. Es la población la que se tiene que levantar contra eso, que denuncien o se encontrarán un día con que a un familiar directo lo maten o que simplemente pasaba por allí y se llevó la peor parte.