CCOO-Justicia Ceuta, erigida en la voz de los problemas que afectan de forma sangrante al ámbito judicial, reclama al
Ministerio la puesta en marcha de un plan de ampliación de la plantilla del
Juzgado de Guardia y compensaciones económicas. Porque hacer una guardia se ha convertido en el peor de los suplicios: están mal pagadas, presentan una falta grave de personal, la acumulación de trabajo es cada vez mayor y todo ello sin propósito de enmienda. Hacer guardia se ha convertido en el agua hirviendo que cualquiera evita, porque parece más una tortura. “Macrocausas de blanqueo de capitales o delitos relacionados con el tráfico de personas debido al volumen de los flujos migratorios, la interceptación de embarcaciones, el narcotráfico y todo lo que deriva del mismo... los robos, hurtos y sustracciones de vehículos están haciendo que el Juzgado de Guardia de Ceuta con su escasa plantilla no soporte a veces está exagerada carga de trabajo”, explica el sindicato en declaraciones a El Faro. Traducido en cifras puede entenderse mejor esta situación, ya que hay jornadas con hasta 30 detenidos, que se corresponden con esas grandes operaciones que llenan titulares de prensa. Detrás de esas noticias hay, como consecuencia, jornadas agotadoras que han llevado a que la amplia mayoría de los funcionarios no quiera hacer guardias. “Si no fuera por la obligación legal y vinculante que tienen en su órgano de destino” las rechazarían. “La Resolución de 2 de julio de 2014 de la Secretaría de Estado de Justicia, por la que se modifica la de 5 de diciembre de 1996, establece que en Ceuta la prestación del servicio de guardia de disponibilidad se realizará en régimen de jornada partida, actuando de nueve a catorce horas en horario de mañana, de lunes a sábado, y en turno rotatorio entre los funcionarios de guardia de lunes a sábado de diecisiete a veinte horas y domingo de diez a catorce horas. Fuera del horario expresado, permanecerán en situación de continua localización para atender puntualmente cualquier incidencia propia del servicio de guardia que pudiera suscitarse. Pese a la regulación, hay veces que realizan jornadas maratonianas”, denuncia la sección sindical. Las guardias de disponibilidad están formadas por un juez, el fiscal, el letrado de la Administración de Justicia, un gestor procesal, dos tramitadores y un auxilio judicial junto al médico forense. Tienen una duración de una semana, que exige estar en una situación de completa disponibilidad para atender todas las cuestiones que suscitan en la guardia. ¿A cuánto se paga cada hora? La retribución no llega ni a 5 euros, cuando “la importancia de los asuntos y decisiones que se toman durante el periodo de guardia y el trabajo que se realiza en la misma justifica una retribución digna que esté a la altura de la responsabilidad, máxime porque las condiciones en las que desarrollan su labor llegan a ser estresantes”. La última entrada de subsaharianos de finales del mes de agosto es digna de recordar entre quienes les tocaron trabajar esa guardia, con identificaciones de supuestos menores, presentación de personas, trámites que realizar... Fueron jornadas de mucha presión y bocadillos, de estar hasta las tantas en el juzgado y volver al siguiente día con la misma o mayor presión laboral esperando. “Cualquier persona, aunque esté fuera del sector jurídico, comprenderá que pagar menos de 5 euros la hora resulta vergonzoso si la comparamos con otros sectores de la Administración. Demasiado esfuerzo y muchas exigencias para unas míseras y calamitosas retribuciones”, apunta CCOO. “En la Guardia no solo se trata las resoluciones sobre la situación personal de los detenidos puestos a disposición judicial, también se está a la recepción e incoación de los procesos correspondientes a los atestados, denuncias y querellas que se presenten durante el tiempo de guardia, la realización de las primeras diligencias de instrucción criminal que resulten procedentes como son las medidas cautelares de protección de las víctimas, la celebración de los juicios inmediatos, la tramitación de las diligencias urgentes y la práctica de cualesquiera otras actuaciones de carácter urgente o inaplazable que la ley atribuye en cualquier orden jurisdiccional”, recuerda. CCOO-Justicia considera que es necesario abordar este problema y acometer medidas urgentes, y no solo aumentando la retribución sino mejorando los medios: más personal y mejoras temporales sobre todo atendiendo a una ciudad como Ceuta en donde determinados delitos se dan en mayor cantidad que en otros puntos del país.