La Comandancia de la Guardia Civil de Ceuta cuenta ya con nuevo material de defensa. Se trata de 125 cascos y otras 125 máscaras antigás, valoradas en unos 200.000 euros, tal y como ha detallado en una nota de prensa la Delegación del Gobierno.
Nada dice la administración central en Ceuta de aumentar el número de efectivos, ya que las asociaciones de la Benemérita han evidenciado en cuantiosas ocasiones la falta de agentes para garantizar la seguridad en la valla. Así que aunque se dote de material, si no hay miembros de apoyo suficiente la desprotección es la misma, tal y como ya expuso la AEGC.
“Estos nuevos elementos tienen por objeto reforzar la protección de los agentes de la Guardia Civil en sus tareas de control de la presión migratoria en el perímetro fronterizo”, indica la Delegación.
“El compromiso del Ministerio del Interior es ir dotando a los agentes de más material de protección, elementos se irán suministrando durante los próximos meses”, añade.
Además de la falta de personal a la que no contesta, ya que ni siquiera han salido vacantes para la valla, hay otro problema añadido, que el número de protecciones llegadas es insuficiente lo que no permite garantizar un uso individualizado, como ya aventuró que pasaría la AUGC.
“El Gobierno atiende así una de las reivindicaciones que plantearon los agentes de este Cuerpo de Seguridad y ha adquirido el compromiso de ir mejorando los recursos de los que dispone la Guardia Civil”, insiste.
Drones para la valla
Por otro lado la Delegación informa ahora de un hecho del que ya informó hace meses este periódico: el empleo de dones en el vallado para complementar las labores de vigilancia.
“Durante el pasado mes de mayo, el Instituto Armado ya formó a algunos de sus agentes en el manejo de drones para mejorar la vigilancia del perímetro fronterizo. Los efectivos realizaron diversos cursos para poder pilotarlos y ya están desde hace algunos meses operativos en la frontera”.
“Estos dos dispositivos llevan integradas cámaras térmicas que facilitan la visibilidad aérea de todo el entorno fronterizo, sobre todo de las zonas más complejas donde la visión de las cámaras instaladas en toda la línea de la frontera se hace más difícil dada las circunstancias del terreno”, detallan.
Ya ya, para que luego los procesen y utilicen con chivos expiatorios de los políticos chapuceros y bien quedas.