Agentes de la Guardia Civil de Ceuta han llevado a cabo en la noche de este domingo otro servicio relacionado con el tráfico de drogas en la zona del Recinto. Allí, en el agua y en la zona de la playa de Fuente Caballos, las patrullas han podido recuperar varios fardos con hachís cuyo peso no ha sido todavía concretado a falta de su traslado al área de Sanidad pero se calcula que superaba los 130 kilos. Los bultos fueron en parte sacados del agua pero no se pudo interceptar embarcación alguna, por lo que se sospechaba que intentaban ser ocultados en la zona. Se activó al Servicio Marítimo para el traslado de la mercancía hasta la base del puerto deportivo. La vía marítima está siendo explotada no solo para la introducción del hachís crecido en las plantaciones de Marruecos en las costas peninsulares, sino también para abastecer el mercado de Ceuta, ante el cierre de la frontera y la imposibilidad de favorecer la entrada de droga por otra vía.
Mientras, por la zona, las patrullas rastrearon los acantilados y las bajadas próximas al lugar del hallazgo, interceptando a dos individuos que fueron trasladados en uno de los vehículos de la Benemérita ante la sospecha de que pudieran tener relación con los hechos que son ahora objeto de investigación, pero este extremo debe ser concretado por las fuerzas actuantes. La alerta se produjo en torno a las diez de la noche, movilizándose varias patrullas de tierra además de la Unidad Marítima del Cuerpo. Ante la ausencia de luz en la zona no pudieron hallarse más bultos.
Este operativo se ha llevado a cabo en una jornada de presión en Ceuta, en donde a las continuas idas y venidas de motos de agua que han estado buscando el despiste del Marítimo para provocar la comisión de delitos, se han sumado los intentos de escapada de marroquíes atrapados en nuestra ciudad así como, a la inversa, las pretendidas entradas de inmigrantes por alguno de los dos espigones que hacen frontera con Marruecos. Ha sido una constante toda la tarde, el ir y venir de las embarcaciones que han llevado a una continua presión en las dos bahías con las vigilancias permanentes de todas las patrullas que estaban de servicio. Muchas de estas embarcaciones buscan el despiste, ejerciendo un auténtico choteo a la Benemérita, persiguiendo como único fin conseguir que otras puedan acometer acciones delictivas o amparando el fondeo de drogas.
Que verano más bonito a ver si pone el vídeo del rey de Marruecos cerca del recinto en el yate de hoy