La Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (FAMPA) que preside Mustafa Mohamed pinchó ayer en hueso en su intento de convencer a la Dirección Provincial de Educación de que se involucre más decididamente en resolver el caos generado en el servicio de comedores escolares, del que “más de 180 niños” han sido formalmente excluidos esta semana tras hacer público los Servicios Centrales del Ministerio un listado definitivo de beneficiarios que no coincide con el inicialmente elaborado en la ciudad autónoma.
Si anteayer los más de 30 padres y madres que acudieron a la Dirección Provincial encontraron en su secretario general, Pedro Alfonso Conejo, una actitud “receptiva”, ayer en Cecilio Gómez se toparon con “balones fuera”.
Según el presidente de la FAMPA, el director provincial aseguró a las familias que la problemática de los comedores escolares responde “al resultado de un procedimiento administrativo que se ha ceñido a los criterios establecidos en la convocatoria de agosto”.
“Conejo nos dijo que el asunto era ahora mismo una prioridad para la Dirección Provincial pero Cecilio Gómez se ha limitado a explicarnos que el jueves habló con Vivas en el Campus Universitario y que es el alcalde el que puede y se ha comprometido a arbitrar soluciones alternativas”, amplió Mohamed, al que acompañaron en su segunda visita a la Administración competente una representación de las Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) de los siete colegios que tienen comedor escolar en la ciudad: 'Príncipe Felipe’, ‘Ramón y Cajal’, ‘Federico García Lorca’, ‘Ortega y Gasset’, ‘Andrés Manjón’, ‘Reina Sofía’ y ‘Pablo Ruiz Picasso’.
Hasta este verano eran los equipos de trabajadores sociales de los centros educativos los que se encargaban, con el presupuesto que transfería el Ministerio, de elegir a los alumnos becados en función de su conocimiento directo de las circunstancias socioeconómicas de cada uno.
El MECyD ha impuesto ahora un procedimiento de concurrencia competitiva con los ingresos familiares del ejercicio 2013 como única vara de medir, sistema que la FAMPA sigue rechazando “rotundamente”, por lo que insiste en que se derogue.
El lunes, visita a la Ciudad Autónoma por la mañana
Las consejeras de Educación y Asuntos Sociales de la Ciudad Autónoma, Mabel Deu y Rabea Mohamed, se comprometieron el martes con los directores de los siete colegios que cuentan con servicio de comedor escolar a impulsar un programa de colaboración social a través de cual se pueda contratar a más cocineros, ayudantes de cocina y educadores con el fin de ampliar el número de estudiantes atendidos en los colegios. Una solución desechada en principio fue la del cátering.
El listado de becarios definitivo del Ministerio ha obligado a excluir a “más de180 niños”, según la FAMPA, que eran beneficiarios del servicio tras la ampliación a 733 de las 615 becas inicialmente adjudicadas en un listado que no coincidió con el definitivo. Los centros se encontraron entonces ante la imposibilidad, por falta de espacio o de recursos para duplicar o triplicar turnos, de asistir a todo el alumnado.
La Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos reprochó ayer a Gómez que la Administración haya concedido becas a estudiantes “en colegios en los que nunca han estado matriculados” y que haya reconocido como beneficiarios a hermanos mientras ha dejado fuera a otros. “Según la Dirección Provincial ese desbarajuste no es posible y, si algún error existe, es ‘comprensible’ por el número de expedientes”, lamentó Mohamed.