Comienza la Feria del Libro con 9 ‘stands’ y un programa cargado de actos
Como cada año, bien entrada ya la primavera, llega la Feria del Libro a nuestra ciudad. Es un punto de encuentro entre los eslabones que componen ese peculiar mundo relacionado con el libro y la lectura. A la aparición de novedades editoriales se suman diversos actos encaminados a servir de acercamiento entre escritores y lectores. Esta nueva edición levantó ayer su particular telón en la Plaza de los Reyes, un enclave idóneo para acoger la gran fiesta local de las letras, que se sitúa como el centro neurálgico de esta fiesta.
La cita se inauguró con nueve ‘stands’ que presentarán su oferta hasta el próximo 3 de junio con un variado programa cargado de muchas más actividades que en ediciones anteriores, algo que los libreros ya exigieron en pasados años y que al fin han logrado, pues lo consideran como un motor para ganar afluencia.
Desde las 19.00 horas la plaza comenzó a llenarse de ciudadanos que deseaban conocer las novedades de esta feria y disfrutar de los primeros espectáculos programados. Los libreros eran algunos de los más felices, el tiempo era fresco y parece que continuará así en los próximos días, un hecho que garantiza público y que puede traducirse en ventas para un sector especialmente castigado durante la crisis. Los amantes del papel impreso curioseaban entre las grandes multitudes de libros que durante estos días se exponen: novelas de aventuras, histórica, de ficción, autobiografías, ensayos, las últimas novedades, los tan aclamados libros de autoayuda, o los recientes ‘best-seller’. Pero sobre todo, si hay un público en el que todos han focalizado su interés ha sido el infantil, ya no sólo con la gran variedad de ejemplares que se ofertan, también la programación de actividades ha prestado gran atención a ellos, y es que además de ser el futuro para el sector, este año está dotado de un carácter especial, pues la homenajeada de esta edición es Gloria Fuertes con motivo del centenario de su nacimiento, y bien sabido es, el amor profesado por la escritora al público infantil.
Y con un homenaje a Fuertes arrancó esta fiesta cultural. Un acto en el que como no podía ser de otra forma, los niños asumieron el protagonismo, fue en el taller ‘Versos para dibujar’, que se prolongó durante toda la jornada vespertina y en el que los niños tuvieron que plasmar sobre papel a modo de dibujo una historia. Divertido, ameno y lúdico acaparó el interés de todos los presentes.
Pero no sólo los más pequeños quisieron disfrutar de este arranque, los adultos pasearon, ojearon y curiosearon entre esa gran oferta que tan sólo se da en una semana al año, porque independientemente del género y los gustos de cada cual, el leer va más allá de las páginas, es ver que justo detrás les está esperando toda una experiencia.