La naviera FRS Iberia detendrá sus servicios en las líneas Melilla-Motril, Alcúdia-Ciutadella e Ibiza-Formentera, en los próximos días.
El cese de operaciones viene motivado por la actual situación de Covid en Europa y el norte de África que supone una reducción significativa del tráfico de pasajeros y, en consecuencia, que dichas rutas generen pérdidas.
Las últimas jornadas en las que FRS Iberia operará estas rutas serán el 10 de diciembre en la línea Melilla-Motril y el 15 de diciembre en Alcúdia-Ciutadella.
Los pasajeros que dispongan de billetes pueden cambiarlos o solicitar su reembolso en el Call Center de FRS Iberia (+34 956 68 18 30) o en booking@frs.es.
Con esta decisión y tras el comienzo de operaciones, el pasado mes de octubre, del fast ferry ‘Levante Jet’ en la línea Ceuta-Algeciras, la compañía reorienta su posición estratégica hacia las rutas del Estrecho de Gibraltar, manteniendo una fuerte capacidad operativa de cara al restablecimiento de las conexiones marítimas con Marruecos.
La única ruta de pasajeros activa en Marruecos, la que une Tánger Med y Nador con Génova, tampoco podrá transportar viajeros
Marruecos no solo ha cancelado desde la medianoche pasada todas sus conexiones aéreas con otros países durante dos semanas, sino que también ha cerrado la frontera de Guerguerat que une el Sahara Occidental con Mauritania y la única conexión marítima de pasajeros que tenía activa con Italia.
Según han informado este martes fuentes de seguridad marroquíes, el paso con Mauritania se ha clausurado asimismo por dos semanas a los viajeros para evitar la propagación de la variante ómicron.
Por otro lado, fuentes del sector del transporte marítimo han explicado que la única ruta de pasajeros que seguía activa con Marruecos, la que une Tánger Med y Nador con la ciudad italiana de Génova, tampoco podrá transportar a viajeros en las próximas dos semanas.
El cierre a pasajeros de esta línea se produce después de que se clausurara, desde la medianoche del pasado domingo, la otra que unía a Marruecos con Europa, concretamente con Francia. Con España el país magrebí mantiene los puertos cerrados a viajeros desde el comienzo de la pandemia.