Las obras para finalizar la nueva construcción están fechadas para finales de año y supondrán el abastecimiento pleno de la ciudad. Ferrovial completó ayer el último lanzamiento de las tuberías que conforman el inmisario que abastecerá de agua el quinto módulo de la desaladora, actualmente en construcción. Las operaciones comenzaron a las 9.30 horas una vez confirmado las buenas condiciones en el mar. Las tuberías fueron hundidas dentro del puerto el pasado enero a la espera de que se terminasen las excavaciones en el fondo marino y se tuvo que reflotar la estructura. Después fue arrastrada por mar antes de que volviera a llenarse de agua para hundir el tubo frente a la estación de Benítez. Previamente se ha estado trabajando en el ensamblaje de esta tubería que se alargará 650 metros en el fondo marino y tendrá un diámetro de un metro por la que se tomará el agua del mar que procesará el quinto módulo. Unos trabajos que ya se completaron y que se culminaron con la fabricación de los lastres de fondeo como paso previo al traslado en barco del inmisario y su hundimiento en el mar. La instalación se ha completado una vez se ha realizado la zanja en el fondo marino, lo que se hace mediante un proceso complejo. Las rocas de mayor tamaño del lecho significan un problema: en algunas ocasiones se pueden sortear con el trazado de la propia tubería, pero en otras hay que moverlas. La solución que se da a un problema complejo es bastante simple: se engancha un globo de buenas dimensiones a la roca, se infla después con aire comprimido y así puede levantar el obstáculo. La eliminación de rocas en la parte más cercana a la costa se ha hecho de forma diferente. En este caso se utiliza una pontona y una retroexcavadora. La pontona es una plataforma de trabajo que se utiliza en obras marítimas, es soporte para transportar cualquier material. La que ha realizado el trabajo en Ceuta consta de una serie de ‘patas’ (Scoov) que se enganchan en el lecho. El problema es que cuando la retroexcavadora hinca la pala tiende a empujar la pontona, la hace inestable y pierde mucha eficacia. Con los ganchos se elimina el retroceso producido durante la excavación. El proyecto dirigido por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) se encuentra ya avanzando en la propia parcela en la que estará ubicada la nueva maquinaria que requerirá el quinto módulo de la desaladora. Obra en las instalaciones Los trabajos para la ampliación del quinto módulo se han encargado a la empresa UTE Castillejos-Cadagua sin embargo el ensemblaje del inmisario ha sido subcontratado a Ferrovial y a una empresa afincada en Tarragona. Con esta nueva ampliación se espera que la desaladora aporte otros 10.000 metros cúbicos al consumo de la ciudad con lo que el aporte total rondará los 33.000 metros cúbicos de agua y se podrá cubrir el consumo total de la ciudad. Las obras del quinto módulo de la desaladora estarán completadas a finales de 2010, el presidente del Ejecutivo local, Juan Vivas, pidió urgencia a la Confederación en la ejecución de la obra tras la obligación de contratar de nuevo el buque aljibe. Vivas recordó sin embargo que el Ejecutivo ceutí siempre deberá estar atento a la posibilidad de tener que adoptar esta opción pese al aumento de suministro que supondrá este quinto módulo: No podemos olvidar que para nuestra autosuficiencia en el abastecimiento de agua dependemos de una máquina y como tal la misma puede sufrir una avería como la que tuvimos a mediados del presente año”.