La Hermandad del Encuentro de Ceuta celebrará este martes la ponencia titulada ‘María, La Virgen’, que pronunciará el hermano mayor de ‘La Macarena’ de Sevilla, José Antonio Fernández Cabrero, en el salón del trono del Palacio de la Asamblea a partir de las 20.30 horas.
¿Sobre qué va a tratar esa conferencia que va a realizar?
Pues voy a hablar de una joven que se quedó embarazada con 14 o 16 años según las escrituras y que fue la alegación de Dios desde Nazaret hasta el Calvario. Que dijo una vez “hágase” y lo mantuvo hasta el final de su vida.
¿Cómo se puso en contacto con usted la Hermandad del Encuentro para que realiza esta ponencia?
Ya estuve en Ceuta en tres ocasiones o cuatro, por razones de Hermandad he estado en tres. Una hablando de la responsabilidad social de las juntas de gobierno, en otra ocasión de la formación y la responsabilidad de la misma en el campo de la juventud y en otra ocasión hablé de la función de los costaleros en el centro de las hermandades: ¿Deben ser porteadores de un palio o de un Cristo o un Misterio o deben estar insertos en la vida de la Hermandad? En esto he estado dos veces. O sea, que tres y dos cinco y en mi cargo de Mapfre he estado dos veces más. Ceuta me resulta familiar, próxima y muy interior para mí.
"Siempre regreso a esta ciudad autónoma con mucho agrado y con ganas, me encanta venir aquí"
Está entonces encantado de volver...
Siempre regreso a Ceuta con mucho agrado y con ganas, me encanta la ciudad.
Por hablar algo más de la ponencia, ¿con qué quiere que se quede el público cuando termine de escucharle?
Esa es una pregunta de un millón de dólares. Quiero que se quede con una cosa: cómo es posible que hace 2023 años una niña primero en Nazaret y luego andando por la Galilea y luego otro poquito en Jerusalén, solamente nos consta que habló cuatro veces en toda su vida. Cómo es posible que María tenga, dentro de la irradiación mundial,tan extendida la mariología o el marianismo.
¿Qué hay detrás de la Virgen? Tendrá que ser verdad que el Evangelio llamado del Espíritu Santo, que es el quinto Evangelio, el de los hechos de los apóstoles, tuvo una presencia brutal de María.
Si algo tienen el agua cuando la bendicen más tiene el vino cuando lo consagran. María tiene que tener muchas cosas de consagración, si no cómo es posible que tú y yo estemos hablando ahora de una niña que habló solo cuatro veces. Que nos conste. Solo cuatro. Pero es verdad que no le puso ninguna objeción a Dios. Moisés le puso muchas objeciones cuando le mandó volver a Egipto. No hacía más que decir “y si me dicen…”, “y si me hacen…”, “y si me piden”, “y si me apalean…”. María no dijo nada: dijo “hágase en mí, pase lo que pase”.
¿Cuál es la diferencia entre María y Moisés? María resolvió su vida con un “hágase”. ¿Estamos resolviendo los cristianos nuestra vida con un “hágase” o somos una trastienda en dimensión espiritual? Los cristianos y las cofradías, si no resolvemos con el mismo “hágase” de María estamos bastante fastidiados.
"En Ceuta conviven tres religiones que vienen del mismo tronco, Abraham: cristianismo, musulmana y hebrea"
¿Algún mensaje a la población ceutí para que se anime a escuchar esta ponencia?
Soy una persona muy respetuosa, el que quiera que esté ahí. Pero soy muy respetuoso con la población y con todas las culturas o sociedad multicultural que hay en Ceuta. Allí estoy y con mi discurso, mi pensamiento y mi filosofía de actuación dispuesto a compartirla con quien quiera. En Ceuta tenemos por ejemplo una población musulmana importante, los musulmanes saben que el Corán la única mujer que nombra por su nombre es a María. Cuando se refiere a la hija del profeta dice la hija del profeta y punto. O la mujer del profeta, o la madre del profeta…
Excepto a María, que dice “María, la virgen, la madre de Jesús”. Pues puede tener el mismo interés que yo.
En Ceuta convivimos tres religiones: la hebrea, o judáica; la musulmana y la cristiana. Y la hindú, y otras más, pero principalmente las tres religiones que digo estamos ahí, venimos del mismo tronco, de Abraham, no entiendo qué hacemos tirándonos piedras al tejado. Pues el que quiera estar ahí encantado, si no, con que haya uno, yo seré feliz.