Comenzó muy fuerte la portavoz del Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía, Fatima Hamed, para señalar que “ustedes son el principal problema que tiene esta ciudad”. A pesar de que unos días antes había realizado unas manifestaciones, rogándole al presidente Vivas que intentara en su discurso presentar la realidad de Ceuta “lo más real posible”, en su manifestación aludió a que “nos trae una realidad que sólo se ve desde el búnker de su despacho”.
Le acusó de no tener ninguna realidad que exponer de Ceuta, “porque han desconectado de la realidad y han contribuido a manchar el nombre de esta institución”.
Hizo Hamed una recomendación al presidente de la Ciudad sobre que, a lo mejor, debía renunciar al cargo, “al igual que ha hecho la presidenta de la Comunidad de Madrid. Se lo digo por si quiere pensarlo durante unos minutos”.
Realizó un balance de los principales problemas que se encontró Vivas cuando llegó al poder hace diecisiete años, entre los que se encontraban la vivienda, la necesidad de un nuevo modelo económico y las comunicaciones. “Hoy resulta que nos encontramos con los mismos problemas, pero hemos añadido otros como la situación en la frontera, la inseguridad o el desempleo”.
Al igual que ha sucedido en otros Debates sobre el Estado de la Ciudad, le recordó a los populares que siguen entendiendo los servicios sociales como la beneficencia.
El Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía es de las formaciones políticas que defiende que Ceuta es un Ayuntamiento y no una autonomía, de acuerdo con lo que, según sus interpretaciones, están ofreciendo las distintas sentencias de los Juzgados donde se presentan las demandas.
Le dijo a Vivas que había tenido tiempo a lo largo de todos estos años de cambiar esta realidad y que Ceuta formara parte, en igualdad de condiciones, de las demás autonomías, pero que no podían ampararse en un informe del Consejo de Estado que, además resulta que no es un órgano vinculante.
A lo largo de toda la intervención, Hamed utilizó uno de los calificativos que ya es marca de su partido como es el de ‘desgobierno’ para referirse al Ejecutivo del presidente Vivas. Igualmente, tampoco fueron muy débiles sus conceptos cuando se refirió al conjunto de los colaboradores que tiene el mismo Vivas en su Gobierno o en su categoría de asesores.
Hizo referencia, en otras ocasiones, en que habían llevado numerosas propuestas a los diferentes plenos y que aunque algunas se habían aprobado, la mayor parte no se habían cumplido.
La portavoz del Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía, Fatima Hamed, le recordó al presidente de la Ciudad Autónoma lo sucedido en el ‘caso Emvicesa’.
Le vino a decir que fue el primer golpe que recibió a los pocos días de iniciarse la legislatura y cuando todavía su gobierno acababa de tomar posesión. Habló de que se había producido una crisis de gobierno que terminó con dos de sus consejeras dimitiendo, además de estar en situación de investigadas.
Para la máxima responsable de esta formación política queda muy claro que fue uno de los momentos de mayor vergüenza para nuestra ciudad en su reciente historia democrática.
De todas maneras, le quiso dejar muy claro que aparte de todo el asunto que se estaba tramitando en el Juzgado, existe un responsable política de la mencionada situación y que no era otro que él mismo, como presidente del Gobierno.
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