Las
familias de los dos ceutíes
muertos tras ser embestidos por una patrullera gibraltareña piden justicia. Ya han denunciado los hechos en Gibraltar y en España, quieren y persiguen que la verdad salga a la luz y que trascienda cómo perdieron sus vidas Musfata y Mohamed. Porque ellos no hablan de accidente, hablan de un auténtico crimen.
La versión ofrecida por el Gobierno de Gibraltar nada tiene que ver con la que dan las familias y los supervivientes. De entrada insisten en que no fueron abordados en aguas gibraltareñas sino en españolas y que toda la escena de los hechos fue recogida por las cámaras del SIVE. Quien mejor sabe lo ocurrido es Nourdine, sobrino de uno de los fallecidos y superviviente junto a un ciudadano portugués de esta auténtica tragedia. En conversación con El Faro, rememora cómo fueron esos momentos. Estaban navegando a unas dos millas de tierra, en aguas españolas cuando les avisaron que se aproximaba la patrullera de Gibraltar. “Estábamos vacíos”, insiste Nourdine. Cuando ya “la teníamos encima”, los ceutíes intentaron inicialmente esquivarla pero hubo un momento en que la semirrígida que ocupaban, dotada con 4 motores, se bloqueó. “Nos quedamos parados”, insiste. Ahí llegaría la peor de las escenas de su vida: “La patrullera se posicionó y nos ‘metió’ a toda velocidad. Sentí el golpe en la espalda y caímos el portugués y yo al suelo. Mi tío y el otro piloto se quedaron ahí y la patrullera les cortó por la mitad”, explica.
La patrullera, insiste, les embistió por detrás desde los cuatro motores hasta la zona en donde estaban sentados. “Estábamos parados”, insiste Nourdine, y en “aguas españolas”. “Cuando nos dieron el golpe en ningún momento encendieron los pirulos ni nos dieron el alto”, añade.
Tras el brutal golpe, su tío Mustafa Dris seguía vivo. Cuenta el superviviente que después de toda esa escena la patrullera “nos amarró” y “nos llevaron a puerto, tardamos unos 45 minutos en llegar hasta Gibraltar. Mi tío estaba vivo todavía. Llamé el 112 para informar, para decirles que estábamos en aguas españolas, que avisaran a la Guardia Civil”.
Las familias insisten en que esto debe esclarecerse, que tiene que haber justicia porque a los dos ceutíes los mataron, les abordaron estando parados. Ocupando una lancha de 4 motores y con la potencia que tiene, dudan de que, de haber sido una persecución como comunicó el gobierno de Gibraltar, les pudiera haber alcanzado su patrullera.
La familia de Mustafa Dris ha quedado destrozada, deja dos hijos huérfanos ya que su mujer murió hace unos años; una madre postrada en la cama con un ictus cerebral y marcapasos; un padre enfermo al que le han dado infartos y una hermana también enferma. No desean a nadie lo que están sufriendo, no paran de darle vueltas a la misma idea: “¿Por qué les tienen que matar?, ¿no les pueden detener sin más?”, se preguntan.
En la imagen tienen las cuchillas de la patrullera gibraltareña y la hilera de muertes que ya se han producido en persecuciones o no. “Los jueces están para juzgar y la Policía para detener. No tenía que haber pasado esto”, insisten.
Ahora confían en las gestiones de los abogados que desde Gibraltar y España están detrás del caso, recopilando pruebas, reclamando grabaciones que verifiquen cómo fue todo y sobre todo testificales.
Van a luchar hasta el final, porque no pueden dejar que esta historia se pierda como una más y que permanezca una versión que, dicen, no es cierta.
El suceso será investigado por un equipo policial independiente
El Gobierno de Gibraltar ha comunicado que como resultado del “reciente trágico fallecimiento de dos personas”, la Policía Real de Gibraltar (Royal Gibraltar Police, RGP), “siguiendo nuestras obligaciones legales”, ha abierto una investigación inicial.
“De cara a la transparencia y rendición de cuentas, el comisario de Policía (Commissioner of Police), tras consultar con la Autoridad Policial de Gibraltar (Gibraltar Police Authority), ha solicitado la asistencia de un equipo de investigación independiente. Como resultado, un equipo de la Dirección de Estándares Profesionales de la Policía Metropolitana (Metropolitan Police, Directorate of Professional Standards) británica, viajará a Gibraltar para hacerse cargo de la investigación”, sentencia en un comunicado oficial.
Se ha nombrado a un agente especial de Contacto con las Familias y se continúa ofreciendo el apoyo necesario a las familias de los fallecidos. “Nuestros agentes también están recibiendo apoyo como resultado de este traumático incidente”, declara. “Podemos confirmar que las autopsias han sido realizadas por un experto Patólogo Forense del Reino Unido. Como resultado de estas, el Instructor Forense (HM Coroner) ha autorizado la entrega de los restos mortales a las familias y se están llevando a cabo los preparativos para su repatriación”.
En cuanto se pueda llevar a cabo tendrá lugar el traslado de los cadáveres a Ceuta para que pueda tener lugar su entierro en Sidi Embarek así como el oportuno rezo con la presencia de sus familias y amigos. Los trámites se han estado acelerando para que pueda tener lugar ese último acto.