Viene el director general de la Guardia Civil. El nuevo. No aquel que desembarcó al poco del 6F para ponerse el chaquetón de guardia que no le correspondía y adoptar su porte hierático ante las preguntas incómodas. Tras aquel Fernández de Mesa que se pintó cual general nombraron a José Manuel Holgado, jurista, profesor... otro talante... al menos sobre el papel. Otro talante que pasa por alto el respeto que se debe tener a los medios de comunicación de esta ciudad a los que se ha negado a atender. Holgado vendrá a hacerse el particular photocall pero evitará hablar de lo que los medios queremos saber, exponer sus ideas sobre asuntos que a todos nos importa como la inmigración o la frontera. Porque Holgado tiene mucho que contar para que elija la opción de callar, para que desembarque en una ciudad complicada como es Ceuta para hacerse una foto firmando en el libro de honor de la Ciudad y otra paseando por una Comandancia que, por cierto, se cae a pedazos.
El director ha optado por ser lo que nunca debe escoger un juez: parcial. Parcial con los medios de comunicación a los que ha elegido dejar en el camino, a los que solo permite que le fotografíen en lugares no incómodos, a los que niega las respuestas a las preguntas que no quiere contestar a saber por qué razones. Pero como abogado que expone sus preguntas al acusado que se niega a declarar para que al menos consten en acta nosotros sí que le vamos a preguntar. Porque queremos saber cuántos guardias civiles van a venir a Ceuta, qué dispositivos de seguridad tiene previsto instalar en la frontera, qué tiene que decir ante las normas cuestionables que tienen que ejecutar los GRS en la frontera con la mercancía, qué mejoras en medios se van a aplicar en la frontera sur... por ejemplo. Preguntas básicas que un director general debería contestar al menos por tener una consideración con los propios guardias civiles cuyas voces son canalizadas en demasiadas ocasiones a través de los periodistas.
Nos tienen acostumbrados a estos plantes, es una falta de respeto que los propios medios hemos consentido desde que se instauraron las comparecencias sin derecho a preguntas o los mudos. Holgado habrá conseguido hoy su único interés perseguido: salir en la foto. En un comunicado nos cuentan que viene a interesarse por los guardias civiles. Permítanme que lo cuestione.