Este fin de semana Rotary Club de Ceuta organizó una importante reunión de los clubs del Rotary de nuestro entorno, vinieron hasta Algeciras en sus vehículos y luego en barco o helicóptero. Dejaron sus coches en el aparcamiento del puerto y allí encontraron el helipuerto y la estación marítima.
También vinieron compañeros rotarios de Marruecos y, por lo que me contaron algunos, dejaron el vehículo en Castillejos, llegaron al paso fronterizo en taxi y pasaron a Ceuta andando, para de esta manera evitar las largas colas que se pueden encontrar al entrar o al salir de Ceuta.
De los que llegaron de la península uno de ellos me ha enviado la factura que tuvo que pagar por dejar su vehículo en el aparcamiento del puerto por un día, ocho horas y cuatro minutos en total (41,45 euros) cuarenta y un euros con cuarenta y cinco céntimos.
Esto reduce el número de visitantes a nuestra ciudad, los familiares y amigos. “Nos dicen, barco o helicóptero y aparcamiento hacen la visita muy cara, prefiero que nos vengáis a ver a la península”.
Comparando los precios de aparcamiento con los de Sevilla, Málaga para avión o tren hay una gran diferencia. Allí nos cobran siete euros por día para 3 a 8 días.
Las compañías navieras y la empresa de helicóptero reciben alguna subvención para hacerles el viaje más económico a los viajeros.
Creo que se podría negociar con el aparcamiento del puerto de Algeciras para una zona de alguna de sus tres plantas para que le aplicaran unos precios especiales a los viajeros que demuestren con billete su destino a Ceuta, lógicamente no tendría la capacidad muy importante como el aeropuerto de Málaga por la gran diferencia de viajeros en uno y otro caso, pero se podría facilitar y abaratar la visita a nuestra ciudad para asegurar que lo utilicen los que interesan, se podría poner condiciones que lo garantice.
Es desproporcionado, por no decir un robo, el coste de ése aparcamiento porteño-algecireño, además del excesivo coste del pasaje a Ceuta. Soy caballa residente en Madrid con ganas de visitar mí tierra pero, por su excesivo coste no voy desde el año 1990., ya es decir. Me resulta más económico ir con mí familia al extranjero que a mi ciudad natal.