El SPEE, a través del Instituto de Formación de Estudios Sociales (IFES), desarrolla un taller de imagen personal para mayores y dependientes
“Acabamos de traspasar el ecuador del curso y el balance no puede ser más positivo pues, además de inculcar en las alumnas multitud de conocimientos sobre peluquería y estética también se les proporciona información extra para que estén preparadas para enfrentarse, en la parte práctica, al colectivo de dependientes y mayores hacia los que se enfoca el taller”. Inmaculada Cadavieco es la directora del taller de Peluquería y Estética que el Servicio Público de Empleo Estatal (SPEE) desarrolla desde el pasado mes de diciembre en las aulas de UGT de la avenida de Madrid. Una iniciativa impulsada por el Instituto de Formación de Estudios Sociales que cuenta con 14 alumnas, todas en desempleo y mayores de 25 años.
Son varios los objetivos del curso. Por un lado, se enfoca hacia colectivos vulnerables (personas mayores y dependientes) de tal manera que las inscritas no solamente aprenden a lo largo de todo un año un oficio sino que, además, en la parte práctica realizan una importante labor social al prestar sus servicios a esas personas dependientes. “Estamos finalizando la parte teórica y, dentro de unos días, comenzaremos con la práctica atendiendo a los usuarios de APROS, Cruz Blanca, la residencia de África, la de Nazaret y Cruz Roja en su atención a los mayores del centro de Villajovita y de la Asociación de Familiares y Enfermos de Alzheimer”, enumera Cadavieco.
Y es que, explica la directora, en Ceuta este tipo de asociaciones y centros no suelen contar con personas contratadas para el embellecimiento de sus usuarios. “En la península habitualmente las residencias y centros de mayores tienen a alguien, pero aquí no, así que nuestra intención es que, tras la finalización del taller alguna de las alumnas pueda ser contratada en este ámbito”, afirma. Por eso las mujeres se van a familiarizar, por ejemplo, con qué es el alzheimer y de qué manera hay que tratar a quienes lo padecen, de tal manera que antes de trabajar en la asociación recibirán una charla e información de mano de las responsables.
Cadavieco, que además de dirigir el taller se encarga de la parte de estética es apoyada para las lecciones sobre peluquería por la especialista Noelia Blanco que enseña a las alumnas todos los trucos para manejar el peine, la tijera, el secador y los colores a la perfección. Las clases se desarrollan en horario de 07.30 a 15.50 de lunes a viernes. El principal atractivo de este taller es, cuentan sus responsables, que alterna el trabajo con la formación ya que mientras adquieren las habilidades las 14 alumnas reciben una remuneración. Un incentivo añadido a un taller que se enfoca como mucho más que un curso típico de peluquería y estética porque la recompensa es triple. No solo es formación. No solo es dinero. También es la satisfacción de saber que estás ayudando a que otras personas se sientan mejor después de tu visita. Porque se miran al espejo y el reflejo que reciben ha sido embellecido.