¿Has pensado alguna vez que hay un mundo diferente? Le planteaba Pablo al público del Revellín, que se ha trasladado esta tarde hasta el auditorio para dejarlo impregnado con su solidaridad, ya que la recaudación de este espectáculo irá destinada a la asociación síndrome de Asperger.
¡Para entenderme… emociónate conmigo! ha aterrizado sobre el Revellín como un espectáculo diferente, que ha denotado la gran creatividad de su coreógrafa ante nuevos retos.
Founaud ha querido contar en su equipo con un nuevo miembro, Pablo, un niño Asperger que en su estreno debut ha llegado como protagonista e hilo conductor de la función. A través de su figura la coreógrafa ha querido reflejar los continuos problemas que sufren estas personas para canalizar sus emociones.
Unas emociones simbolizadas a través de las bailarinas que han acompañado a Pablo durante toda la representación.