Uno de los presuntos autores del apedreamiento a varios guardias civiles en el Príncipe Alfonso, K.A.M., alias ‘Markitos’, pasará hoy a disposición judicial, después de que el magistrado decretara, el pasado viernes, prisión preventiva en el centro penitenciario de los Rosales.
El presunto autor de las agresiones a un agente de la guardia civil en la algarada que tuvo lugar hace ocho días deberá testificar ante el juez sobre su presunta implicación en los hechos por los que fue detenido.
En estos días también tendrá lugar un careo con los guardias civiles que actuaron aquella tarde, sin perjuicio de que el magistrado pueda llamar a otros testigos de la trifulca, según apuntaban familiares del detenido.
Recordar que el arrestado es una de las once personas imputadas en la ‘Operación Duna’, de la cual quedó en libertad bajo fianza después de tres años como recluso. K.A.M. reivindicó su inocencia durante la declaración prestada en los juzgados, reconstruyendo los hechos acaecidos durante la agresión. Sus familiares comentaron que se encontraba en una mezquita de la barriada junto a un cafetín llamado ‘Sambo’, el cual también frecuentó el domingo, cuando estalló el ataque contra el grupo de guardias civiles. Su familia defiende que K.A.M. cuenta con innumerables testigos que se encontraban con él a la salida de la mezquita que, según aseguraron, declararán a su favor. También aseguraron que, posteriormente, regresó a su domicilio, junto a su esposa e hija, tras lo cual llevó a la pequeña a un parque infantil del Príncipe Felipe, para regresar, finalmente, a su vivienda.
Sus familiares han recalcado la inocencia de K.A.M. negando que fuera uno de los impulsores del desorden ocurrido en el Príncipe y apuntando a que los verdaderos responsables del apedreamiento son jóvenes. No obstante, y a tenor de las investigaciones abiertas, las autoridades analizan la participación de adultos en estas acciones premeditadas que nacen de una organización previa y con el objetivo de evitar que las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado actúen en la barriada.
Los disturbios del pasado domingo 16 comenzaron cuando los agentes de la Guardia Civil dieron el alto a un vehículo, en el que viajaban dos personas, en un control en Loma Colmenar. Previamente se había dado aviso de que, presuntamente, había sido sustraído en la barriada Miramar. Al dar la indicación de parada en el punto de verificación, el conductor aceleró apresuradamente para internarse en el Príncipe, donde se produjo la agresión.
Este sospechoso de intervenir en el apedreamiento carece de carné de conducir, reconocieron sus parientes, aunque aclararon que, en ningún momento, utilizó la furgoneta en la que fue detenido, sino que se encontraba en el vehículo estacionado a la espera de un amigo, propietario y conductor del mismo, con quien fue a recoger a los niños al colegio. Contrasta con la versión de la Guardia Civil, en la cual figura que K.A.M. opuso una fuerte resistencia cuando conducía el vehículo sin permiso de conducir, por lo que también se le han instruido diligencias por un delito contra la seguridad del tráfico.
Por otra parte, recordar que en el transcurso de las investigaciones abiertas, la Guardia Civil localizaba, en dos intervenciones en un plazo de 48 horas, sendos zulos en los que se hallaron dos armas, una de ellas, una pistola del calibre 6,35 milímetros y otra automática marca ‘Astra’, calibre 9 milímetros y provista de cargador y munición que se sospecha pudo ser robada a un militar o integrante de las fuerzas de seguridad.