El juez Togado Militar dictó en la tarde de ayer prisión preventiva para los tres cabos legionarios detenidos el martes acusados de un presunto delito contra la salud pública, al ser vinculados por la Guardia Civil con el alijo de hachís encontrado en Almería el pasado octubre durante unas maniobras militares. El cuarto detenido, acusado de una desobediencia, sí que fue puesto en libertad.
La decisión del juez se conocía a primera hora de la tarde y después de una jornada maratoniana de interrogatorios que había comenzado el martes a las cinco de la tarde y que no terminó hasta pasadas las cuatro de la madrugada. En ese momento el juez ordenó la prorroga de todas las detenciones hasta que ya ayer tarde dictó los autos de prisión preventiva solo para los cabos que habían sido acusados de tráfico de hachís. Los tres han sido trasladados a Recarga en prisión preventiva, tal y como concretaron ayer a este medio fuentes de la Comgeceu.
La operación, que está siendo dirigida por la Policía Judicial de la Guardia Civil de Almería, sigue abierta ya que se está trabajando en perfilar algunas sombras que quedan en torno a este caso por lo que no se descarta la práctica de nuevas detenciones y no solo dentro del ámbito castrense.
Los arrestos llevados a cabo hasta el momento se han producido un mes y medio después del hallazgo del hachís en mochilas que fueron trasladadas en los vehículos militares que, partiendo de Ceuta, iban a participar en las maniobras peninsulares reseñadas. La carga del hachís se llevó a cabo en Ceuta y en el hecho de que fuera localizada en el cuartel de la Legión de Almería tuvo que ver mucho la propia Legión, ya que fue uno de sus miembros el que dio la voz de alarma al hallar mochilas que no eran las reglamentarias, por lo que se levantaron sospechas.
El Ministerio de Defensa confirmó nada más producirse el decomiso que la cantidad encontrada ascendía a más de 200 kilos de hachís. Nunca más se ofrecieron datos concretos en cuanto al pesaje final del alijo, aunque ayer fuentes de toda solvencia lo situaron en poco más de 300 kilos que es la cantidad que ha señalado de hecho en su investigación la Policía Judicial de Almería, cuyos agentes se desplazaron esta semana a la ciudad para coordinar las declaraciones y arrestos de los presuntos implicados.
El nuevo Código Penal Militar que entrará en vigor el próximo enero contempla penas de dos años de prisión por el embarque de drogas en vehículos militares, como es el caso.