El silencio, la mejor arma

La Asamblea se sumó ayer, con un minuto de silencio, a las declaraciones y actos públicos con los que partidos políticos y colectivos ciudadanos han mostrado en los últimos días su repulsa y consternación por la muerte, en la madrugada del pasado viernes, del joven Munir E. G. M.

A las 12:00, miembros del Gobierno –consejeros y viceconsejeros–, diputados del PP y de Caballas, representante sindicales, el superintendente de la Policía Local y empleados públicos, entre otros, se concentraron frente a la sede de la Administración local  para, con su presencia, testimoniar el rechazo de la institución, y por extensión de los ceutíes, al asesinato del estudiante de 20 años acribillado en el barriada Príncipe Alfonso. Sólo faltó el PSOE, que horas más tarde por boca de su secretario general, José Antonio Carracao, justificaría su ausencia por las formas utilizadas a su juicio en la convocatoria.
Pese a la distancia y desde Lisboa, donde ayer asistía a una cumbre sobre inmigración, el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, quiso también secundar el acto  porque, aseguró, “mi corazón estaba con esas personas e instituciones”. El jefe del Ejecutivo reconoció que “estamos ante una situación y hechos que preocupan a todos como sociedad”, por lo que “ésta en su conjunto debe responder”. Como máximo representante de la Ciudad, mostró su firmeza en achacar la muerte de Munir a “personas sin escrúpulos que creen que pueden imponerse a la ley y generan víctimas inocentes”, una distorsión de la convivencia que, añadió, “tiene que tener una respuesta categórica por parte de toda la sociedad ceutí”.
La respuesta de la sociedad ante sucesos como los de la pasada semana “debe venir desde la posición de rechazo categórico y absoluto de quienes, con la ley al margen, causan tanto dolor e intranquilidad; desde la defensa a ultranza del Estado de Derecho y confianza en la Justicia; desde el apoyo sin fisuras a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado; desde la constante y permanente apelación a la colaboración ciudadana; y desde la posición unánime de todas las fuerzas políticas”, consideraba ayer el presidente. Frente a cualquier tentación de ceder ante los violentos, lanzó un mensaje de solidaridad a las víctimas y les recordó “que vamos a ganar la batalla, porque suele ganar a quien ampara la razón y, en este caso, el lado de los buenos sabemos todos dónde está”.
 En ese discurso coincidía Susana Román, consejera de Fomento y presidenta accidental por la ausencia del jefe del Ejecutivo. Tras agradecer a los ciudadanos su presencia, incidió en el “más absoluto apoyo y solidaridad” de las formaciones políticas de la Asamblea “con la familia” del joven fallecido y en el “apoyo a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, que son los que se tienen que ocupar de protegernos y de proteger nuestras libertades, que al final es lo que está en juego en todo esto”. La Ciudad, como recalcó, confía también en que otro de los poderes del Estado, el Judicial, “actúe de forma contundente para que un crimen como éste no quede impune”.
También presente a las puertas de la Asamblea, el portavoz de Caballas, Mohamed Ali, consideraba que el acto convocado ayer era “necesario para mostrar la repulsa y las condolencias”, y también para abrir un periodo de “reflexión” en el seno de la institución para que “en el futuro entre todos podamos cambiar la política en materia de seguridad en esta ciudad”. No en vano, consideró “estrictamente necesario dar un giro a lo que está pasando”, un escenario en el que “las fuerzas políticas juegan un papel primordial”.
El líder del PSOE, José Antonio Carracao, justificaba su ausencia en el acto aludiendo a que “no es de recibo” convocar un minuto de silencio varios días después del suceso. En tono crítico, acusó al Gobierno local de no saber “dónde está ni dónde estar” y le reprochó que ninguno de sus representantes acudiera el lunes a la protesta convocada a las puertas del IES ‘Siete Colinas’.